Unidas por Santander (UxS) denuncia que los partidos que forman el equipo de Gobierno, Partido Popular y Ciudadanos, han incumplido el mandato del pleno de modificar la ordenanza de protección del arbolado urbano para mejorar la conservación de las zonas verdes en Santander.
Pese a la moción aprobada a instancias de su concejal, Miguel Saro, hace casi un año, el equipo de Gobierno ha continuado con su política en la última licencia urbanística que ha concedido para construir una nueva promoción de 35 viviendas de lujo en el cruce del número 31 de la Avenida de Los Castros con la calle Manuel Prieto Lavín, y que supone la eliminación de decenas de árboles en la zona.
“El Ayuntamiento de Santander, a cada paso que da en actuaciones directas o con concesión de licencias, demuestra que no tiene ningún tipo de interés en proteger el arbolado local de nuestra ciudad y que el único árbol que le interesa es aquel construido por leds en el cual se pueda ver representada la bandera de España o cualquier otro símbolo de su gusto”, ha lamentado Saro.
Según la maqueta mostrada en público, no se aprecia que la construcción vaya a respetar el arbolado existente en ese parque, pese a que la moción presentada por UxS y aprobada por todo el pleno municipal requeriría establecer un criterio proteccionista en cualquier proyecto de urbanización que incluya zonas arboladas.
La moción conllevaba presentar una memoria escrita en cada proyecto que describiera el arbolado, tanto existente como proyectado, para conocer la afección del proyecto a las zonas verdes de cada zona, e incluir en la planificación de cada obra aspectos como la movilidad, la edificabilidad, infraestructuras y servicios, diversidad de usos, la calidad ambiental o la adecuada gestión de los recursos.
En dicha memoria también debería incluirse un documento técnico de protección del arbolado existente, “que son un valor en sí mismo y no un mero adorno de cualquier actuación urbanizadora”, y establecía como requisito especificar los ejemplares a proteger, trasplantar o eliminar, con su correspondiente señalización y, en su caso, condiciones de trasplante o de restitución del arbolado afectado.
Sin embargo, tras casi un año, el equipo de Gobierno no ha movido un solo papel ni ha convocado a asociaciones conservacionistas para revertir la política “arboricida” que se ha llevado a cabo durante los últimos años, y que se ha limitado a pavimentar cualquier zona verde de la ciudad.