Por norma general existe incompatibilidad entre trabajar y cobrar, al
mismo tiempo, la pensión de jubilación. Pero hay algunas excepciones
como las siguientes, de las que referenciamos algunos de los requisitos
más relevantes:
1. La jubilación parcial
Para que esta jubilación parcial pueda hacerse efectiva, va a ser
necesario el cumplimiento de dos condiciones básicas: Por una parte, que
el trabajador, el cual ha de haber cumplido los requisitos de
cotización oportunos para cobrar la pensión de jubilación, haya
llegado a la edad de 61 años.
2. La jubilación flexible
Se caracteriza por la compatibilidad del cobro de una pensión con la
realización de una jornada laboral remunerada a tiempo parcial. Pero,
en esta ocasión, la reducción de la jornada laboral no deberá ser
superior al 75 % ni inferior al 50 %. Por otro lado, va a ser preciso
que la empresa en la que desempeña sus labores el trabajador formalice
un contrato de relevo con otro empleado.
3. La jubilación activa.
Esta modalidad de jubilación permite la posibilidad de compatibilizar
el disfrute de la prestación contributiva de jubilación con la
realización de cualquier trabajo, siempre que se haya cumplido la edad
ordinaria de jubilación y la cuantía de la pensión causada ha de
alcanzar el 100%.