El Gobierno de Cantabria, los ayuntamientos de la comarca del Saja y la Confederación Hidrográfica del Cantábrico (CHC) han acordado la creación de un grupo de trabajo a tres bandas que se encargará de coordinar las actuaciones prioritarias de conservación en los cauces de los ríos para evitar que se produzcan nuevos desbordamientos e inundaciones como las del pasado mes de enero.
Este es el resultado de la reunión que han mantenido en la sede de la Confederación en Santander el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla; los alcaldes del Saja y el presidente del órgano responsable de la gestión de las cuencas hidrográficas, Manuel Gutiérrez.
Revilla, que se comprometió a asistir a este encuentro tras el que mantuvo, el pasado martes, con los responsables de los ayuntamientos afectados por las pasadas inundaciones, ha valorado la creación de esta comisión mixta que, según ha explicado, puede constituirse «con cierta rapidez».
Sin embargo, ha trasladado a Manuel Gutiérrez la necesidad de intervenir con urgencia en los cauces de los ríos cántabros antes de que se repitan episodios como los vividos el pasado mes de enero, que podrían provocar, tal y como han advertido los alcaldes, daños no solo materiales, sino también personales.
«Ahora mismo hay en los ríos una cantidad de material sedimentado, fruto de las inundaciones de enero, y una situación como aquella podría provocar desbordamientos en toda Cantabria», ha alertado Revilla.
El jefe del Ejecutivo ha afirmado que el presidente de la CHC «está con el ánimo de dar una solución» al problema y ha agradecido su disposición a trasladarse a Cantabria y reunirse con los municipios afectados.
Por su parte, Manuel Gutiérrez ha reconocido que «en los años anteriores la Confederación no había aplicado un presupuesto adecuado a esas labores de mantenimiento y conservación», que tan solo contaban con una partida de 80.000 euros, mientras que este año el compromiso es invertir 2 millones de euros en 70 puntos de toda Cantabria antes de que acabe el año, «más de 20 veces más».
Gutiérrez ha informado de la próxima licitación de tres proyectos de restauración de márgenes, por un importe de 800.000 euros, en el río Saja, concretamente en los núcleos de Renedo y Terán de Cabuérniga; en el río Quivierda, en Carmona, y en el río Besaya, a su paso por Santa Cruz y Arenas de Iguña.
Además, ha garantizado una partida anual de al menos 1 millón de euros para realizar de forma permanente actuaciones de conservación en función de las necesidades que surjan en cada momento.
Finalmente, ha anunciado un proyecto de protección en Cabezón de la Sal y Mazcuerras que supondrá una inversión de 6 millones de euros e incluirá la construcción de un muro de contención de 5 metros de altura para evitar desbordamientos en esa zona en caso de que se produzcan avenidas extraordinarias
En representación de los ayuntamientos, el alcalde de Mazcuerras, Javier Camino, se ha mostrado «optimista» de cara a solucionar el problema y ha señalado el compromiso del Gobierno cántabro, tanto de la Consejería de Obras Públicas como de Medio Ambiente, y de la propia Confederación de realizar, de forma inmediata, actuaciones que prioricen la seguridad de viviendas y particulares, antes de ejecutar otros proyectos más importantes a medio plazo.
También han estado presentes en el encuentro los alcaldes de Reocín, Pablo Diestro; Los Tojos, Belén Ceballos; Cabezón de la Sal, Víctor Reinoso; Alfoz de Lloredo, Enrique Bretones; Cabuérniga, Nicolás Toral, y Ruente, Jaime Díaz. En representación de la CHC, han asistido el comisario de Aguas, Jesús María Garitaonandia, y el comisario adjunto, Jorge Antonio Rodríguez.