Como el mejor de los prestidigitadores, el Gobierno Regional presidido por Miguel Javier Rodríguez – y no, no me he equivocado, son las palabras que el mismo Miguel Ángel Revilla dijo en la última reunión que tuvimos la Asociación de Empresas de Ocio Nocturno de Cantabria – donde nos trasladó que “en época de pandemia sanitaria el Consejero de Sanidad es quien toma las decisiones”.
A mí me sonó a que él en este tema ni pincha ni corta, que, si es la escaleta de La Sexta Noche, El Hormiguero, o similar, ahí sí que tiene competencias. Pero no me quiero distraer del tema del artículo, por el cual estoy muy “contento” y es que se ha rescatado a la Hostería. Ya tenemos nuestra ayuda de 1.500 euros, pero no es como el sueldo Nescafé, esta ayuda no es todos los meses ni mucho menos para toda la vida, es simplemente una paga única.
Bueno, pues para mostrar los números que casi nunca mienten, he realizado un pequeño estudio y voy a poner de ejemplo un bar típico en Cantabria y que es más o menos la media de todos nuestros bares:
El Bar restaurante PACO es un establecimiento que cuenta con 3 trabajadores y un autónomo como propietario. Éste último, Paco, cierra su establecimiento el 14 marzo y empieza a percibir las siguientes ayudas: cese de autónomos durante 3,5 meses a razón de 800 euros al mes, bonificación total de la cuota de autónomos durante 3,5 meses, el 26 de marzo percibe el cheque resistencia que, al tener 3 trabajadores, es de 225 euros a la semana. De momento sumamos 2.025 euros. Además, tiene otra ayuda de la Consejería Turismo de 450 euros al tener menos de 5 trabajadores, y por último en diciembre, el cheque urgencia de 1.500 euros en un pago único. El total percibido es de 3.975 euros de ayudas de las cuales tendrá que tributar el año que viene como empresa el 25%, con lo cual se le quedará en 2.981,25 euros.
Paco entre retenciones, autónomos, más el 115, 111 y el modelo 202 ha tenido que abonar al estado 4.103 euros, con lo cual, si Paco hace la “cuenta de la vieja” le salen -1.121,75 euros. Si a eso le sumamos más de 4 meses cerrado al no tener terraza, abonando suministros, y alquiler (contando con un casero inteligente), imagínese lo contento que esta Paco con estas ayudas.
Y es aquí donde nuestro Gobierno, tanto regional como estatal, nos hace su mejor truco de magia, con el que hace ver a la población que da ayudas muy importantes y de muchos millones de euros, las cuales repartimos entre muchos miles de empresas de todo tipo: hoteles, bares, cafeterías, guías de turismo, organizadores de congresos y agencias de viaje, entre otros. Es evidente que en la práctica no sirven para nada.
Y mi pregunta es muy sencilla, ¿no sería mejor suprimir todo tipo de impuestos a los establecimientos que no puedan ejercer su actividad? Y complementar esta supresión de impuestos con un Plan de Rescate porque es lo que necesita la hostelería en estos momentos, con un salvavidas no nos sirve, necesitamos un plan estructural y una mesa de diálogo con el gobierno, pero lo necesitamos ayer, no mañana. Muchos puestos de trabajo directos e indirectos dependen de ese plan, pero claro, para eso habría que trabajar duro, cosa que hasta ahora no se ha producido.
La hostelería se siente como el propietario de una casa que le quitan por no poder pagar, pero encima tiene que seguir pagando la hipoteca, con una salvedad, a nosotros nos cierran teniendo nuestros pagos al día. Llevando en Cantabria más de un mes cerrados – disculpen, con las terrazas abiertas en estos calurosos días de verano – somos la tercera comunidad con mayor incidencia de Covid-19 en los últimos siete días. A esto se le llama ineficacia en la materia sanitaria y económica. ¿Cuándo se van a dar cuenta nuestro Consejero de Sanidad y nuestro presidente, que la hostelería es segura y cumple todas las normas y que nosotros no somos los responsables de la pandemia? Está claro y demostrado que la hostelería abierta y la bajada de incidencia del Covid-19 pueden cohabitar. En Madrid con la hostelería abierta bajan los contagios por una buena gestión sanitario-económica, dos elementos que tienen que ir de la mano y no por separado, y aquí, a escasos 460 km de distancia en una región más pequeña con una orografía menos propensa al Covid la incidencia de casos acumulados se dispara.
Señores políticos, es la hora de dejarse de populismos baratos los cuales solo contentan al electorado, y coger el toro por los cuernos, con decisiones reflexionadas y coherentes, porque como bien dicen, sin salud no hay economía, pero es que sin economía tampoco hay salud, por lo menos para los hosteleros.
Fuente: eldiariomontanes.es / Martes, 15 de diciembre de 2020 / Sergio Gómez / Vicepresidente de la Asociación de Empresas de Ocio Nocturno de Cantabria