El Ayuntamiento ha presentado hoy el Plan de Actuación Turística (PAT) 2020-25, un documento técnico elaborado desde la participación de más de 150 personas y agentes del sector, con 56 medidas enmarcadas en 5 ejes y 18 líneas de actuación –gobernanza; sostenibilidad; accesibilidad; diversificación y desestacionalización; y excelencia- con el objetivo de “hacer del turismo un recurso sostenible”.
Así lo ha anunciado la alcaldesa Gema Igual, quien, acompañada de la concejala de Turismo, Miriam Díaz, ha dado a conocer los principales aspectos de esta “hoja de ruta para afrontar el futuro turístico con compromiso con el sector y con la ciudad”.
El plan se validó ayer en el Consejo Asesor de Turismo y esta mañana se presentó en la Comisión municipal, donde se ha dado un plazo de 10 días para que los grupos políticos puedan realizar sus aportaciones, aunque, como ya han participado de forma activa en la redacción “está prácticamente cerrado”, ha matizado la regidora.
Gema Igual ha puesto en valor la importancia del sector turístico para la ciudad como motor económico, “que genera numerosos puestos de trabajo –tanto por las profesiones afectadas tanto de manera directa como indirecta- ya que se trata de un área muy transversal y que los beneficios que generan son muchísimos”.
También ha resaltado la importancia de la planificación, y de contar con unos objetivos a medio y largo plazo y ha recordado que el primer plan 2015-20 acabó con un grado de ejecución del 87% y que ahora, el PAT 20-25 servirá de base para el plan de choque, para los presupuestos municipales y para los proyectos que se presenten a las ayudas que otorguen otras administraciones.
Antes del año de la covid, en los últimos diez años, las cifras del turismo experimentaron un notable ascenso y los turistas habían cambiado la percepción de la ciudad hacia otro modelo más cosmopolita y cultural, con un mayor número de visitantes extranjeros interesados también en el turismo activo.
“Con la innovación y la cultura como pilares nos hemos situado como uno de los destinos preferidos, una situación que se ha visto reforzada durante la pandemia, donde hemos logrado unos buenos datos –aunque claramente insuficientes- pero muchísimo mejores que la mayoría de ciudades españolas”, ha recalcado, felicitando a la concejala de Turismo y a su equipo “por haber sabido adelantarse en pleno confinamiento con una campaña de recuerdo y generando un turismo seguro, tan necesario en estos tiempos”.
A partir de ahí se ha recabado la opinión de más de 150 personas, entidades y asociaciones de manera activa, incluidos 50 colectivos que representan a todos los agentes del sector turístico; se han analizado los datos, las fortalezas y debilidades, las tendencias y procedencias, etc “con el objetivo de hacer del turismo un recurso sostenible económicamente; temporalmente; socialmente; sostenible; transversal y consecuente con la Agenda 2030 y con los Objetivos de Desarrollo Sostenible como horizonte de todas las acciones de gobierno”.
La alcaldesa ha remarcado que el plan es un documento técnico, colaborativo, “que ha tenido y tendrá toda la participación posible”; que refleja las fortalezas sanitarias de la ciudad –con el Hospital Valdecilla como buque insignia-; la seguridad que otorgan los espacios abiertos de Santander; sus playas; los numerosos parques en el centro; la ausencia de masificación; las agradables temperaturas; la fidelidad de los turistas; el cómodo acceso en vehículo privado…
“La ciudad es atractiva por una amplia diversidad de conceptos: por su gastronomía, por el turismo activo, por la posibilidad de acoger congresos de pequeño formato -que son los que se van a desarrollar a partir de ahora-; somos privilegiados en Turismo y este documento es muy valioso para ayudar a la recuperación económica de Santander”, ha añadido.
Por su parte, Miriam Díaz ha detallado los aspectos más destacados del plan y algunas de las 56 medidas que contempla en 18 líneas de actuación y cinco ejes: “Es un documento realista, aunque también ambicioso; coherente con la planificación vigente y con la sostenibilidad como base académica; y socialmente comprometido con los santanderinos, ya que queremos que estén orgullosos de la ciudad que se quiere visitar”.
En el eje de gobernanza, la concejala ha explicado que se divide en cuatro líneas de actuación –información, participación, transparencia y colaboración– y como ejemplos de medidas ha aludido a la memoria anual de contratación de la Concejalía de Turismo y de la Empresa Municipal Palacio de la Magdalena –una iniciativa pionera de la que no dispone ninguna otra administración o la solicitud de la creación de un Consejo Asesor de Turismo Regional.
Sobre esta petición ha recalcado la “necesidad” de que los municipios turísticos de Cantabria establezcan estrategias “alineadas”, dado que “Santander necesita a toda la región para promocionarse y al revés, porque el 40% del turismo se aloja en la capital de Cantabria y es preciso prolongar las estancias y poner en marcha acciones conjuntas”.
En el eje de sostenibilidad, con 4 líneas de actuación –impacto ambiental, social, económico y Agenda 2030- Miriam Díaz ha mencionado entre las medidas el programa de cálculo de la huella de carbono y la compensación en el ámbito local para empresas ; el desarrollo de un código ético del turismo en Santander; la promoción de redes de producción y consumo local; la monitorización de impacto económico del turismo; o el sistema de indicadores de sostenibilidad turística.
Respecto al eje de accesibilidad, la concejala ha reconocido la “dificultad” que entraña esta área, aunque también ha subrayado que Santander se encuentra entre las ciudades españolas más accesibles y que las playas son de las mejor valoradas de España. No obstante, “es necesario seguir trabajando” y por ello en tres líneas de actuación se incluyen 10 medidas como las subvenciones para el impulso a la accesibilidad en espacios y servicios privados.
El cuarto eje, de diversificación y desestacionalización, se articula en tres líneas de actuación con ocho medidas como la comercialización de la tarjeta turística, el apoyo económico a clubes de producto, o el programa de comercio y cruceros “dado que hay muy pocos lugares en el mundo donde los grandes barcos puedan arribar en el centro de la ciudad”.
Finalmente, en el eje de la excelencia, Miriam Díaz ha pormenorizado las cuatro líneas de actuación en las que se incluyen 13 medidas: la promoción del destino a nivel nacional e internacional; la profesionalización del sector con condiciones de trabajo “dignas”; el turismo post covid-19, con información actualizada sobre la regulación; y la calidad “como elemento diferenciador”. “Tenemos que ser muy exigentes y conseguir los indicativos de Q de calidad que otorga el Instituto para la Calidad Turística Española (ICTE) para que la oferta turística de Santander sea reconocida por su excelencia”, ha concluido.