El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha hecho un llamamiento a la población a donar sangre como gesto solidaridad hacia los demás y a recuperar la posición de liderazgo que la Comunidad Autónoma tenía hace unos años en este terreno a nivel nacional.
«Estoy un poco preocupado porque teníamos una posición mejor hace un par de años, ahora somos los 8 en donación de sangre. Por eso hago un llamamiento a los jóvenes, que son los que están en edad de donar, porque no hay acto más solidario que donar sangre y órganos», ha dicho Revilla durante su intervención, esta mañana, en el acto conmemorativo del Día Mundial del Donante, que se ha celebrado en el hall del Hospital Valdecilla.
Pese a que Cantabria es «autosuficiente» en reservas de sangre, Revilla ha apelado a los cántabros a realizar un esfuerzo para recuperar los niveles anteriores, atender la demanda que hay en otros lugares de España o, incluso, «por puro egoísmo». Según ha dicho, «casi todos vamos a tener que recibir sangre en algún momento de nuestras vidas y qué menos que ser solidarios y pensar en los demás y en nosotros mismos».
En este sentido, ha reafirmado el compromiso de las instituciones para habilitar los medios necesarios para que los ciudadanos puedan realizar sus donaciones y ha agradecido la labor de entidades como la Hermandad de Donantes o el Banco de Sangre y Tejidos de Cantabria.
Por otro lado, ha aprovechado su presencia en Valdecilla ¿»emblema de la sanidad de Cantabria y España»– para trasladar el cariño y el agradecimiento de los cántabros a los profesionales sanitarios por su «trabajo abnegado» en la lucha contra el coronavirus. Gracias a ello, ha añadido, la región ha podido superar la pandemia en mejores condiciones que otras comunidades autónomas y recuperar al 92% de los contagiados, una de las tasas más altas de España.
«Eso demuestra la potencia de nuestra sanidad y es para sentirnos absolutamente orgullosos del trabajo que habéis venido haciendo aquí. Gracias a vuestra vocación de servicio público, Cantabria no estuvo nunca angustiada y hemos podido vencer esta pandemia», ha dicho subrayado. Y ante la posibilidad de que pueda venir un rebrote, el jefe del Ejecutivo espera que no se dé ese escenario, si bien ha garantizado que el sistema sanitario autonómico está preparado para ello.
Finalmente, ha mostrado su satisfacción por acudir un año más a este acto «entrañable» que ha incluido la plantación de un abedul, bautizado con el nombre de Solidaridad, en representación del espíritu del donante de sangre.
El presidente regional ha estado acompañado en el acto por el consejero de Sanidad, Miguel Rodríguez; la concejala de Juventud, Educación y Salud del Ayuntamiento de Santander, Noemí Méndez; el director gerente del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla, Rafael Tejido; el presidente de la Hermandad de Donantes de Sangre de Cantabria, Ignacio Álvarez; el gerente de la Fundación Marqués de Valdecilla, Raúl Pesquera, y el director del Banco de Sangre y Tejidos de Cantabria, José Luis Arroyo.
«Héroes y heroínas»
Miguel Rodríguez ha definido a los donantes como «unas personas que con su gesto altruista se convierten héroes y heroínas cotidianos y anónimos que salvan vidas a diario». En este sentido ha destacado que los donantes de sangre representan la mejor imagen de Cantabria, «una comunidad autónoma pequeña en tamaño y población, pero muy grande en valores como la cooperación, la fraternidad y la solidaridad».
También se ha referido al lema del día mundial de este año, ‘Dona sangre para que el mundo sea más saludable’, y ha recordado que la necesidad de sangre es un hecho permanente para la estructura sanitaria y creciente para las actividades terapéuticas aplicadas a la actividad asistencial.
«Los componentes sanguíneos son productos insustituibles, que no se pueden fabricar», ha indicado, «por lo que sin ese gesto altruista y de solidaridad» como es la donación de sangre la prestación asistencial podría verse paralizada.
El titular de Sanidad considera fundamental fomentar la donación periódica de sangre entre la población para convertirla en «un hecho habitual en nuestra vida cotidiana». De cara a facilitar la donación, ha puesto en valor la iniciativa de la Consejería de Cultura y del Banco de Sangre y Tejidos de Cantabria para celebrar jornadas de donación de sangre en espacios culturales de la comunidad autónoma.
Rodríguez ha finalizado su intervención expresando «el agradecimiento de todo el sistema sanitario a los donantes, porque sin vosotros la sanidad no podría funcionar».
Pilar del sistema sanitario
Por su parte, Ignacio Álvarez ha citado como pilares básicos del sistema sanitario las infraestructuras, los profesionales y los donantes, y ha asegurdo que su labor es fundamental para Cantabria. «Si no hubiera donantes, algo tan importante como los trasplantes de órganos y las cirugías no serían posible», ha comentado.
De hecho, ha apuntado que 9 de cada 10 personas van a necesitar una transfusión de sangre alguna vez en su vida, por lo que se invierta en impulsar la donación va a repercutir en toda la población.
El presidente de la Hermandad de Donantes ha hecho hincapié en la importancia de fidelizar a los donantes para que realicen este gesto periódicamente. En este sentido, ha hecho un llamamiento a la juventud para que se sumen a la donación de sangre, porque «los jóvenes en Cantabria son gente muy solidaria, muy trabajadora, muy responsable y muy seria».
Además, se ha referido a la importancia de la celebración de este acto, que coincide con el 50 aniversario de la Asociación Hermandad Donantes de Sangre de Cantabria, que se celebrará el 22 de julio del próximo mes. Desde su puesta en marcha el 22 de julio de 1970, 104.000 cántabros han donado sangre, ha destacado Ignacio Álvarez.
Como consecuencia de la pandemia del coronavirus y de las medidas de seguridad establecidas, ha explicado que la tradicional entrega de distinciones de grandes donantes (75 donaciones en el caso de los hombres y 60 en las mujeres) tendrá lugar el próximo mes durante la celebración de la asamblea general.
Comunidad autosuficiente
Cantabria es autosuficiente en materia de donación de sangre, lo que requiere mantener un ritmo diario de 80-100 donaciones para atender las necesidades asistenciales de los centros sanitarios.
Esta capacidad de abastecimiento se está manteniendo también durante este año, a pesar de que la pandemia del coronavirus ha implicado cambios en el procedimiento de donación, con el fin de garantizar la seguridad de donantes, receptores y profesionales. Durante los primeros meses de 2020, las donaciones han registrado un descenso de 1.100 donaciones con respecto al pasado año, aunque también han disminuido las transfusiones de forma significativa por la menor actividad quirúrgica.
En 2019 se alcanzaron 21.841 donaciones realizadas por 13.378 donantes (46% hombres y 54% mujeres), que representan el 3,3% de la población potencialmente donantes, cuya edad oscila entre 18 y 65 años. De esta forma, la tasa de donación en Cantabria es de 37 donantes por 1.000 habitantes, lo que sitúa a la comunidad autónoma en los puestos de cabeza a nivel nacional.