Los veterinarios han vuelto a exigir a las Administraciones que se les tenga en cuenta como expertos en epidemiología durante la crisis sanitaria originada por el COVID-19, como ya hicieran al inicio de la pandemia. «Aportamos un punto de vista preventivo«, asegura el presidente del Consejo General de Colegios Veterinarios de España (OCV), Luis Alberto Calvo Sáez.
Según lamenta, en España la medicina y el Sistema Nacional de Salud (SNS) están enfocados en el sistema asistencial, pero no en el de la prevención. «Donde está la gracia es en prevenir, no en curar, pero curar es lo más fácil y lo más caro», subraya.
En este sentido, la OCV reclama que la Administración les tenga en cuenta como expertos en materia de prevención en enfermedades, pues además, si hay un sector profesional que tiene currículum en manejo de enfermedades animales que pueden transmitirse a personas (zoonosis), como es el caso del COVID-19, este es el de los veterinarios. «Nos entristece, nos parece injusto este mal aprovechamiento de los medios, como zootecnistas y epidemiólogos nos ha molestado mucho».
Y es que, tal y como denuncian, sólo en algunas comunidades autónomas se ha contado con veterinarios como expertos en salud pública y epidemias para afrontar la desescalada, pero no así en el Gobierno central. «Es inexplicable», reprocha Calvo, que lamenta que solo se contemple «únicamente y exclusivamente» el carácter asistencial. «Cuando miras las financiaciones del Estado, la proporción es de 99 a 1 sobre 100: por cada 99 euros que se destinan a asistencia, 1 se destina a prevención», explica.
Así pues, el sector reclama que la crisis sanitaria se aborde de un modo integral bajo el enfoque One Health-Una Sola Salud, ya que el virus tiene un origen animal (zoonosis). Este modelo, según explica Calvo, no establece líneas divisorias entre salud humana y salud animal, sino que trata de establecer un enfoque interdisciplinar.
«Todo está integrado, en el mundo globalizado con tantas interacciones, nosotros somos capaces de movernos por el mundo en cuestión de horas, dependemos todos de todos, si la salud y el medio ambiente se van al garete, nos vamos los demás, hay que considerar todo como un problema único, la salud es única y global», señala.
REIVINDICACIONES
La OCV reivindica una mayor presencia de los veterinarios en temas de salud pública y para ello, reclama la inclusión de éstos en la posible reforma de la Ley de Salud Pública. «No nos tienen en cuenta para nada», critica.
De hecho, el trabajo que hacen los veterinarios de manera diaria en temas de salud pública, según explica Calvo, es de «rastreador». «Si ahora mismo surge un problema en una granja, sabemos que hay que cerrar la granja, poner en cuarentena a los de alrededor y ver cuáles están enfermos, esto es válido para el COVID-19 y para otras enfermedades, y es extrapolable a la especie humana», dice.
Pero el problema está en que a los veterinarios se les ve como «médicos de animales», cuando eso es solo «una de las partes». «Tenemos definidas tres tipos de actuaciones: la producción animal, la seguridad alimentaria y la clínica», expone el experto, que lamenta que solo se acuerden de los veterinarios cuando algo falla en los sistemas de producción de alimentos, como ocurrió en el caso de la listeriosis en Sevilla o cuando hay casos de salmonelosis. «No nos damos cuenta de que es un problema global, somos muy invisibles para la sociedad», comenta.
Otra de sus reivindicaciones es que las clínicas veterinarias sean consideradas establecimientos sanitarios y que, por tanto, estén exentas de IVA, en lugar de tener un IVA de un 21%. «Estamos haciendo salud pública, queremos estar en el SNS y tener acceso a las especialidades multidisciplinares y un trato igualitario a todos los niveles con otros profesionales sanitarios; el Estado parece que no lo reconoce, es una cosa inaudita», afirma.
Imagen: portalveterinaria.com