Responsabilidad y prudencia. Ésa es la petición que el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha hecho hoy a los cántabros y las cántabras en su mensaje de Navidad de este año, centrado por completo en el impacto de la Covid-19. Tras recordar a las más de 350 personas fallecidas en la Comunidad Autónoma desde que comenzó la pandemia y trasladar su solidaridad a los familiares, Revilla ha vuelto a apelar al respeto a las normas y medidas sanitarias vigentes, especialmente de cara a la celebración de las fiestas, y ha animado a mirar al futuro con la esperanza y la confianza puestas en la inminente llegada de la vacuna, que será “el principio del fin de la enfermedad”.
“Os lo imploro: seamos prudentes. Respetad las normas y cuidaos más que nunca hasta que llegue la vacuna. Hoy por hoy, la única vacuna somos nosotros”, ha enfatizado, al tiempo que ha defendido las decisiones “dolorosas”, pero “imprescindibles”, adoptadas por el Gobierno para garantizar la seguridad de la población.
El presidente ha reconocido el sacrificio hecho por la ciudadanía en los últimos meses, sacrificio que debe continuar “un poco más” para no poner en riesgo a los más vulnerables, sobre todo a los mayores, porque si bien “lo peor ha pasado” y la solución está “al alcance de la mano”, la pandemia “no da tregua” y la realidad sigue siendo “muy complicada”.
Por ello, ha invitado a vivir las fiestas navideñas “de manera diferente”, a no bajar la guardia y a evitar al máximo los contactos sociales, “un precio pequeño si con ello salvamos una sola vida y preservamos la salud de los nuestros”. Además del impacto sanitario, Revilla ha recordado que la pandemia también ha puesto en peligro el bienestar social y el desarrollo económico de Cantabria. En este sentido, ha empatizado con quienes han visto amenazados sus empleos, sus negocios o sus planes de futuro y ha valorado el esfuerzo que está haciendo el Gobierno regional para poner a disposición de los sectores más afectados todas las ayudas y medidas de choque posibles.
“Este virus nos enfrenta a un dilema maquiavélico: la salud frente a la economía. Estamos realizando un gran esfuerzo para tratar de hacer compatibles ambas cosas, aunque no es tarea fácil. Pero como dije desde el primer día, no podemos permitir que el virus económico acabe siendo incluso más letal que el sanitario”, ha apuntado.
“Hay que vacunarse”
Respecto a la vacuna, el jefe del Ejecutivo cántabro ha garantizado que todos los cántabros y las cántabras tendrán la oportunidad de acceder a ella de forma progresiva y ha hecho un llamamiento a acudir a vacunarse “con total y absoluta seguridad”, ya que su efectividad vendrá avalada por la certificación científica. “No tengáis duda. Hay que vacunarse. Yo lo haré en cuanto me toque”, ha añadido.
Para Miguel Ángel Revilla, la normalidad irá llegando a medida que crezca el porcentaje de personas vacunadas, se reduzca el riesgo de contagio y baje la presión hospitalaria, momento que los expertos sitúan alrededor del verano y a partir del cual –ha dicho- “estaremos en condiciones de ganar la batalla a la Covid-19”.
Por último, ha deseado al pueblo cántabro “mucha salud, las mejores fiestas posibles y un venturoso 2021” que ponga fin a la “pesadilla” del coronavirus. “Pensemos en la Navidad de 2021 y en todas las que están por llegar y hagamos cuanto esté en nuestras manos para que no falte nadie y para que todos podamos volver a celebrarlas con la alegría y el calor familiar”, ha concluido.