«Pido como en el baloncesto un tiempo muerto para la crítica, lo pido para arreglar el problema sanitario, para luego consensuar medidas y sacar adelante el país», afirmó Miguel Ángel Revilla, tras la conferencia de presidentes autonómicos.
En cuanto la situación económica y un posible replanteo de los presupestos o de las inversiones en 2020, el presidente cántabro afirmó que «he planteado las inversiones al presidente del Gobierno. Hay que reactivar la vida económica porque sino estaríamos en una situación de paro feroz. No se pueden parar los AVEs, no se pueden para las obras públicas, no se puede parar en general la construcción, ni las empresas. Lo que sí habrá que hacer es un esfuerzo enorme por volver a recuperar el principal negocio que tiene este país y que es el turismo. ¿Cuándo volveremos a ver a 87 millones de extranjeros en este país? Cuando representa más del 12% del PIB y está caído absolutamente en unas regiones más que en otras. A Cantabria le afecta, pero también hay que pensar en una Canarias, maravillosa tierra, donde recibían más de 20 millones de personas y se darían por contentos con recibir este año, contando que enero y febrero ha sido bueno, tres millones y medio. Eso son situaciones tremendas. No se puede parar la actividad económica, los proyectos hay que seguir haciéndolos, como el Museo de Prehistoria (MUPAC), el AVE, hay que seguir haciendo carreteras. No se puede parar la economía, porque la crisis económica puede traer más efectos nocivos que la propia crisis sanitaria».
Por otra parte, después de la quinta videoconferencia, el presidente de Cantabria, ha afirmado que «ya no hay la angustia aquella de que no había camas, no había UCIS, esto está más controlado».
En cambio, el presidente de la región sí se ha referido a algún efecto discordante para con el presidente del Gobierno, al comentar que «de la misma manera que había un consenso al principio de todos apoyando, al Gobierno ya veo que aunque no sea por estas cuestiones, sino por otras, empieza a haber disensiones fruto de la polémica partidista que hemos visto el otro día en el Congreso de los Diputados y que se ha trasladado hoy a la reunión de presidentes autonómicos con el presidente de España. Incluso una persona moderada como el presidente gallego ya ha metido sus puyas. Ha sido una situación un poco distinta, pero seguimos estando todos unidos en que hay que arreglar este problema y que sí, la cosa está mucho mejor que hace un mes cuando empezamos a reunirnos».