El futuro plan de gestión del lobo incluirá medidas para prevenir los ataques de los lobos y también para compensar a los ganaderos extensivos de la región los daños que pueda ocasionar en sus cabañas.
Así se ha puesto de manifiesto hoy en el transcurso de la reunión de la Mesa del Lobo, que ha presidido el consejero de Medio Rural, Pesca y Alimentación, Jesús Oria, quien ha defendido el contraol de ejemplares y ha expresado su total apoyo al codirector del Parque Nacional de Picos de Europa por Cantabria, Ángel Serdio, frente a las denuncias ecologistas.
La reunión ha contado con la presencia de una treintena de representantes de organizaciones ganaderas, ecologistas, conservacionistas y sindicatos agrarios, además del director general del Medio Natural, Antonio Lucio, y el propio Serdio, jefe del servicio de Conservación de la Naturaleza.
Oria ha reiterado que la finalidad última de este plan, que podría aprobarse en el primer trimestre de 2019, es lograr un estado de conservación favorable para el lobo y que la relación entre la ganadería extensiva y esta especie, que «nunca va a estar libre de conflictos», se mantenga «dentro de los límites del razonable debate y lejos de las posiciones maximalistas o de los oportunistas, que tanto daño hacen a su gestión».
Así, ha señalado que las medidas preventivas y compensatorias son herramientas esenciales y que el control de ejemplares «no es más que otra herramienta que debe utilizarse basándose siempre en la mejor información disponible y con los daños ocasionados como principal factor de decisión», ha informado el Gobierno regional en un comunicado de prensa.
Oria ha afirmado que el plan de gestión cumplirá con el objetivo de indemnizar los daños del lobo en toda Cantabria por parte del Gobierno, pondrá en marcha el apoyo a las medidas preventivas y los pagos por servicios ambientales de la ganadería extensiva en zonas loberas, y encuadrará los controles de ejemplares «en el marco de la legislación de caza, sin renunciar en modo alguno a la intervención directa del personal de la Consejería, que va a seguir siendo, como lo es hasta ahora, determinante en el manejo de la especie».
Entre las medidas preventivas, el plan de gestión contempla ayudas para mantenimiento de perros guardianes y la contratación de pastores o vigilantes del ganado en pastos comunales, medida esta última a la que podrán acceder las entidades locales propietarias de los montes.
Durante su intervención, Oria ha manifestado «de forma rotunda» el absoluto apoyo de la Consejería de Medio Rural, Pesca y Alimentación al trabajo que en la gestión del Parque Nacional de los Picos de Europa y en la gestión del lobo viene realizando la Dirección General del Medio Natural, y en concreto el codirector del Parque Nacional por Cantabria, Ángel Serdio, frente a las denuncias ecologistas.
INFORMACIÓN PÚBLICA Y APROBACIÓN
Oria ha explicado que, si se aprueba como está previsto la modificación de la Ley de Caza, que está dentro del proyecto de Ley de Medidas Fiscales y Administrativas que acompaña a los presupuestos para 2019, el plan saldrá a información pública a principios de enero y podría estar aprobado y entrar en vigor en el mes de marzo.
El consejero ha rechazado las acusaciones de «electoralismo» y ha recordado que la modificación de la Ley de Caza se inició hace más de un año, en octubre de 2017, y que el proyecto de ley ha sido sometido a información pública hace meses y ha recibido alegaciones «incluso por parte de quienes ahora hablan de puertas traseras».
Ha insistido en que el documento pretende consolidar un escenario de convivencia, ya que en todas las regiones del mundo donde hay lobos y hay ganadería extensiva se producen daños y se generan conflictos porque, según ha dicho, es imposible acabar con los daños «salvo que se pretenda, sin decirlo, que el lobo desaparezca de nuestro territorio».
Para Oria, la ganadería extensiva es «esencial» para nuestra región por razones económicas y sociales, pero también «ecológicas», ya que no se entendería la naturaleza de Cantabria sin la presencia del ganado.
El plan de gestión implica, asimismo, la creación formal, como órgano consultivo, de la Mesa del Lobo. La norma de creación y regulación de su funcionamiento establecerá también de forma clara sus funciones y composición.
Finalmente, el director general del Medio Natural, Antonio Lucio, ha destacado que el lobo es una especie que no ha dejado de ser cinegética durante los últimos 20 años, periodo en que ha pasado de contar con cinco grupos presentes en la región a, al menos, 13, por lo que a su entender, resulta evidente que mantener al lobo como especie de caza es perfectamente compatible con el cumplimiento de la obligación legal de mantener su estado de conservación favorable.