El consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Guillermo Blanco, ha visitado los viñedos de Bodegas Picos de Cabariezo, en Cabezón de Liébana, para comprobar las mejoras que esta bodega de vinos lebaniega ha realizado en sus instalaciones con los fondos Leader que gestiona el Gobierno de Cantabria y el Grupo de Acción Local (GAL) Liébana.
Durante su visita, Blanco ha abogado por aprovechar las potencialidades agroalimentarias de la comarca de Liébana para fortalecer el sector cántabro y contribuir a su crecimiento como “una de las actividades más en auge que existen en estos momentos en la economía regional”.
Ha destacado que “Liébana es la cuna de las denominaciones de origen en Cantabria”, al contar con cuatro distinciones de calidad de las nueve que tiene registrada la región en la Unión Europea, incluida la Indicación Geográfica Protegida (IGP) del Vino de Liébana.
“Esta comarca representa en el seno de la Unión Europea la mayor concentración por kilómetro cuadrado de sellos de calidad registrados en un selecto club de productos que por tradición, prestigio y reputación han merecido estas denominaciones”, ha recordado Blanco.
Por ello, ha reafirmado el compromiso del Gobierno de Cantabria de seguir apoyando iniciativas que permitan la llegada de inversiones al sector agroalimentario, y especialmente, a la comarca de Liébana, en su opinión, “una zona que es garantía de alta calidad por los vinos, los quesos y las mieles que elaboran con tanto esmero y profesionalidad sus productores”.
También ha asegurado que su departamento seguirá apoyando al sector agroalimentario por su importancia en la economía regional, “al representar más del 22% del Producto Interior Bruto (PIB) industrial de la región”.
Una labor en la que, a su parecer, “resulta fundamental” el papel de los Grupos de Acción Local como “los brazos que tiene la Administración para llegar donde sus propios medios no le permiten” y fomentar el emprendimiento empresarial para que las economías de las zonas rurales puedan desarrollarse y hacer frente a problemas como el despoblamiento o el envejecimiento de sus habitantes.
En el caso de Liébana, ha destacado que el GAL Liébana está desarrollando una labor “muy importante” a la hora de animar a los empresarios de la zona y a inversores procedentes de fuera de la comarca a que desarrollen proyectos en sus municipios que permitan dinamizar la zona.
“Tenemos que facilitar las cosas a nuestros productores para que sigan desarrollando sus proyectos en Cantabria y el sector agroalimentario siga impulsando la economía local de nuestros pueblos”, ha finalizado Blanco.
Proyección de futuro
El consejero ha estado acompañado en la visita por la directora general de Desarrollo Rural, Marisa Pascual; el presidente del Grupo de Acción Local Liébana, Gregorio Alonso, y dos de los propietarios de Bodegas Pico Cabariezo.
El presidente del GAL Liébana, Gregorio Alonso, ha destacado la importancia de invertir en proyectos” con proyección de futuro” como el de Bodegas Pico de Cabariezo que impulsen el sector agroalimentario, “con una pujanza estupenda en Liébana”.
Alonso ha animado a invertir en este tipo de negocios, “con tantas posibilidades en Liébana”, ante las dificultades que tiene el vino de Liébana, en su opinión, “con una calidad y poderío indiscutibles”, para abastecer a la gran demanda que hay en el mercado.
Finalmente, José Antonio Parra, uno de los propietarios de Bodegas Pico Cabariezo, ha agradecido a la Consejería y al GAL Liébana por la ayuda prestada de casi 17.000 euros para llevar a cabo una inversión de unos 34.000 euros que ha permitido ampliar la plantación de nuevas hectáreas de viñedos en Cabezón de Liébana, así como su modernización mediante la instalación de un sistema de riego que permite distribuir los abonos y los tratamientos fitosanitarios.
Para Parra, “esta inversión es muy importante porque permitirá facilitar mucho más el trabajo y contribuirá a la mejora de la calidad del producto final”.
Pico de Cabariezo
Con más de dos décadas de historia, Bodegas Pico Cabariezo produce y elabora desde hace dos años bajo el sello IGP Vino de la Tierra de Liébana con una producción estimada de unos 7.500 kilos de uva en diferentes variedades, tales como mencía, tempranillo, garnacha tinta, syrah, cabernet sauvigno, palomino, chardonnay, godello, gewürztraimer, sumando más de 15.000 cepas plantadas.
Cuenta con más de 5 hectáreas de terreno, posee 16 tanques de acero inoxidable con el que produce vino de IGP y variedades que no están incluidas en el sello de calidad, además de contar con barricas de whisky, brandy y orujo.
A lo largo de estas dos últimas décadas ha sido galardonada, entre otros premios, con las distinciones Alimentos de Cantabria a la Industria Agroalimentaria 2019; Oro Catavium World Wine & Spirits Competition 2019, y Oro Top Wine & Spirits 2019, por su producción de aguardiente de orujo Picos de Cabariezo y Ginebra As de Picos Tropical.