La Comisión de Desarrollo Sostenible de Santander ha aprobado de forma definitiva la concreción de equipamiento para acometer la remodelación de las Dependencias Capitulares y el Archivo Catedralicio, el paso previo a la licencia y el comienzo de las obras.
Con este acuerdo, que deberá ratificar este jueves, 28 de febrero, el pleno de la Corporación, se ultiman los pasos para la ejecución de este proyecto, que impulsa el Obispado de Santander y está cofinanciado también por el Ayuntamiento –que aporta 200.000 euros– y por el Ministerio de Fomento, con cargo al 1,5 % Cultural.
Junto a este trámite, también se elevará al pleno de este mes la aprobación provisional de la modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para la nueva sede del Museo de Prehistoria y Arqueología de Cantabria (MUPAC) en Puertochico y la aprobación definitiva de un estudio de detalle para la instalación de un nuevo establecimiento comercial en El Alisal.
Según ha explicado en un comunicado el concejal de Infraestructuras, Urbanismo y Vivienda, César Díaz, en el caso del primero de los acuerdos, establece los parámetros y especificaciones técnicas para abordar un proyecto que supone recuperar una parte importante del patrimonio y la historia de la ciudad, ponerlo en valor y acercarlo a los ciudadanos.
En concreto, el proyecto consiste en la remodelación integral de las Dependencias Capitulares de la Catedral para habilitarlas como Museo, Archivo Diocesano y sala de consultas.
Los trabajos se corresponden con la quinta fase del Plan Director de la Catedral de Santander –que dejó redactado Joaquín González Echegaray–, en la que se preveía la recuperación de los restos del Castillo del Rey y la remodelación de las Dependencias Capitulares.
De esta manera, se podrán hacer accesible al público el Archivo Diocesano del que, en la actualidad, una gran parte se encuentra almacenada en dependencias dispersas, en ocasiones en varios edificios y parte fuera de Santander.
Además, se pondrá en valor un edificio con problemas estructurales y en desuso, aprovechando su ubicación privilegiada y mejorando notablemente la accesibilidad al recinto catedralicio; y se recuperará el único muro que ha sobrevivido hasta hoy del antiguo Castillo de San Felipe.
«Para la ciudad, este proyecto supone continuar en la línea de recuperación de su patrimonio histórico y arquitectónico para potenciarlo, darlo a conocer y acercarlo a los ciudadanos, mejorando, al mismo tiempo, el entorno urbano de un enclave de gran relevancia para Santander como es el que rodea a la Catedral», ha afirmado Díaz.
El proyecto conllevará una inversión de alrededor de 2 millones de euros, financiados al 75% por el Ministerio de Fomento (con cargo al 1,5% Cultural). El 25% restante lo costearán el Ayuntamiento y el Obispado, asumiendo la administración municipal una aportación de 253.000 euros.
Con esta iniciativa continúa la línea de trabajo conjunto del Ayuntamiento y el Obispado para la mejora de todo el entorno catedralicio.
En este sentido, Díaz ha recordado el proyecto de recuperación de la Torre de la Catedral y su apertura al público como centro de interpretación de la historia de la ciudad; las obras que se acometen actualmente para la recuperación de la calle Los Azogues, que incluyen excavaciones arqueológicas por si existieran restos de la antigua ciudad medieval o romana; y el proyecto de mejora de la plaza de Eguino y Trecu, actualmente en fase de adjudicación.
MODIFICACIÓN DEL PGOU PARA EL MUPAC
Al margen de este asunto, la Comisión de Desarrollo Sostenible también ha aprobado este lunes de manera provisional la modificación puntual del PGOU para la construcción de la nueva sede del MUPAC en el solar de Puertochico.
Según ha recordado Díaz, la modificación fue aprobada inicialmente en pleno en el mes de noviembre y ahora, una vez superada la fase de información pública, se procede a la aprobación provisional y se continúa con la tramitación.
Por último, en la reunión se ha dado también luz verde a la aprobación definitiva de un estudio de detalle para la implantación de un nuevo establecimiento comercial en la calle República Checa, en El Alisal, que contará con una superficie de unos 1.850 metros cuadrados y más de 100 plazas de aparcamiento.
En el estudio de detalle se establecen las alineaciones y rasantes, así como la ordenación de volúmenes en la parcela, donde se prevé ejecutar una plataforma horizontal, con el aparcamiento en superficie y la posibilidad de habilitar también una marquesina para proteger de las inclemencias meteorológicas.
También se contempla el tratamiento paisajístico de la parcela, con la plantación de arbolado, el tratamiento de los taludes y la creación de zonas verdes.
La apertura de este nuevo supermercado es posible gracias a la modificación puntual del Plan General aprobada en noviembre para permitir usos terciarios en zonas residenciales de edificación abierta y unifamiliar.