El secretario de Infraestructuras y Transportes de la Ejecutiva federal del PSOE y diputado por Cantabria, Pedro Casares, ha afirmado que la licitación de las obras de modernización de la catenaria en las Cercanías de ancho métrico es el «primer paso» para lograr una red «del siglo XXI» en la región.
El también líder del partido en Santander, y portavoz y concejal en el Ayuntamiento, ha destacado el «compromiso» del Gobierno de Pedro Sánchez para que la Comunidad Autónoma tenga un servicio moderno y poner fin a las «persistentes incidencias» que hay ahora.
Y como muestra de ese compromiso del Ejecutivo central, en funciones en la actualidad, Casares también se ha referido a los 138 millones de euros que se van a invertir en los próximos dos años para renovar la flota de trenes, estando prevista la adjudicación de los veinte primeros vehículos en primavera de 2020.
Y en ese «proyecto de Legislatura», con un Plan de Cercanías con una inversión global de 600 millones se enmarca la licitación de 1,9 millones para modernizar la catenaria en la red de Cercanías de ancho métrico de Cantabria, en el tramo que va de Santander a Cabezón de la Sal y en el que comunica la capital cántabra con Orejo, y con un plazo de ejecución de siete meses.
«Mejorar la red de Cercanías es una prioridad en Cantabria porque no solo estamos hablando de un servicio de transporte público fundamental sino también de cómo apostar desde las administraciones por la movilidad y la sostenibilidad ambiental potenciando medios de transporte comunitarios que contaminen menos«, ha subraya el diputado socialista.
Por otra parte, Casares ha criticado que durante los siete años de Gobierno de Mariano Rajoy «no se invirtió realmente, ni en el mantenimiento y mejora de la red de Cercanías de Cantabria, ni en la renovación del material rodante, generando un déficit endémico en el sistema que han acabado pagando los cántabros».
En esos años, ha lamentado, el PP optó por el «abandono» de una red de transporte público «fundamental», en el sentido de que es «transversal en las comunicaciones y desplazamientos en regiones como Cantabria». Así, «la falta de inversiones, presupuesto tras presupuesto», llevó al tren de Cercanías a una situación «crítica».
«Un déficit en la inversión en mantener la infraestructura que han acabado pagando los cántabros que diariamente utilizan este transporte público para desplazarse por la región, desde Cabezón de la Sal, Torrelavega o Solares hasta Santander, por ejemplo, para ir a trabajar o a realizar gestiones», se ha quejado Casares.
Y para finalizar, ha garantizado que el Gobierno de España va a «seguir avanzando» en inversiones y proyectos en la red de Cercanías de Cantabria, «pese a estar en funciones demostrando la voluntad y el compromiso de mejorar las infraestructuras de la región».