La comunidad de Cantabria se encuentra ya en epidemia de gripe, en «plena curva ascendente», pero el pico máximo de su incidencia se espera que se dé en las «próximas seis semanas» y, una vez alcanzado, «descenderá rápidamente».
Así lo ha indicado la consejera de Sanidad, Luisa Real, en declaraciones a RTVE tras la visita que ha realizado este viernes a las obras de mejora y accesibilidad del Hospital de Liencres y el nuevo microscopio quirúrgico del servicio de Oftalmología.
En concreto, según los últimos datos disponibles, correspondientes a la semana del 24 al 30 de diciembre, la incidencia de la gripe en Cantabria es de 90,21 casos por cada 100.000 habitantes.
En esa semana se han registrado en la región un total de siete ingresos por complicaciones de la gripe, seis en Valdecilla y uno en Sierrallana, todos ellos de personas de más de 70 años y con pluripatologías y de los que, a día de hoy, según ha indicado Real, permanecen ingresados todavía cinco.
En Cantabria, desde el inicio de la temporada de control (1 de octubre), se han diagnosticado clínicamente un total de 1.268 casos de gripe y se ha registrado un fallecimiento, que tuvo lugar en el mes de noviembre.
Sobre los ingresos por complicaciones de la gripe, la consejera ha manifestado que «en todos los casos» son personas de más de 70 años y que tienen pluripatologías, es decir, que «tienen otras enfermedades de base».
A pesar de encontrarse Cantabria ya en epidemia de gripe, Real ha vuelto a recomendar la vacunación, sobre todo a personas mayores y con pluripatologías, porque «aún quedan» vacunas en los centros de salud de la región.
«Sigo recomendando que las personas que no se hayan vacunado se vacunen porque, aunque tarda una semana en ser efectiva, siempre es una protección y es la única medida preventiva científicamente comprobada», ha dicho la titular de Sanidad, que también ha destacado otras medidas para evitar contagios como el lavado de manos.