La Asociación de Médicos Residentes de Cantabria, que preside Cristina García Rivero, y los alumnos del Centro de facultad, con Marcos Ortiz Gutiérrez como delegado, anunciaron hoy, martes, que, en su condición de médicos en formación, se suman a la propuesta de huelga general para derogar el Real Decreto 29/2020 y frenar así las injusticias que viven y las intenciones de destrucción del sistema sanitario.
La plaza del Ayuntamiento de Santander fue hoy el escenario de una concentración de protesta contra el Real Decreto 29/2020 y del abandono del Gobierno regional.
Marcos Ortiz afirmó que la aprobación del Real Decreto supone un riesgo para la Salud Pública y garantías de calidad asistencial, además de que llena de incertidumbre a aquellos que están terminando la carrera de Medicina y han comenzado con la preparación del examen MIR.
“Hemos luchado con incansable esfuerzo por mejorar nuestras condiciones desde que accedimos a la Universidad, dedicando multitud de horas y sacrificando en ocasiones su vida personal”, declaró Cristina García durante la lectura de un comunicado.
“Con la aprobación del Real Decreto–Ley 29/2020 se desprestigia la formación sanitaria especializada y echa por tierra nuestro esfuerzo, asumiendo que la formación MIR es inútil”, señalaron los representantes de MIRCAN. Además hicieron hincapié “en que no se puede olvidar que lo más doloroso de estas circunstancias es el gran perjuicio que todo supone al paciente, el gran motor de nuestra vocación y trabajo diario”.
La Asociación de Médicos Residentes de Cantabria solicita la derogación inmediata del Real Decreto y comenzar las negociaciones para mejorar sus condiciones. “Se trata de un momento histórico de gran magnitud y también pedimos a la sociedad que participe para defender aquello que tanto nos ha costado conseguir, una sanidad pública de calidad que garantice contar con los profesionales más preparados para ello”, comentó Cristina García.
Como propuestas alternativas al Real Decreto plantean ampliar el número de plazas para acceder a la formación especializada y mejorar sus condiciones puesto que muchos de los médicos españoles al acabar su formación emigran a países europeos en búsqueda de unas mejores condiciones laborales.
Representantes del Sindicato Médico y la Asociación de MIR España, con el apoyo de MIRCAN, reivindican ciertas mejoras.
1.Respeto a las normas existentes en relación a los derechos y deberes de los trabajadores. Libranza de guardias. Realización de un máximo de 5 guardias mensuales obligatorias. Se procurarán espacios de descanso dignos durante las guardias,. Fin a la cama caliente. Las bajas no serán cubiertas por otros residentes.
2.Se abonará el pago de los festivos especiales de 2019, cumpliendo así el acuerdo realizado en Diciembre de 2020 por el que llevamos meses peleando.
3.Establece un plus de nocturnidad, para todos los que realicen jornada de guardias de 24 horas. Consideración del tiempo trabajado como Médico a afectos de jubilación.
4.En los casos de prolongación de jornada de los equipos quirúrgicos, se abonará a los residentes una cantidad proporcional a la abonada a los adjuntos especialistas del mismo equipo por la misma prolongación.
5.Permisos destinados a la realización de cursos y otras actividades formativas no obligatorias. Derecho a las rotaciones externas pese a que ello suponga menor personal de formación en el servicio, teniendo en cuenta que teóricamente somos personal no imprescindible
6.Los residentes de primer año realizarán su labor asistencial con la supervisión directa y física de un Adjunto Especialista, sea cual sea la hora del día.
7.En caso de Incapacidad Temporal del residente, sus retribuciones durante la duración de la misma serán el 100% de las que le hubieran correspondido de prestar servicios en activo durante dicho período.
Para la Asociación de Médicos Residentes de Cantabria la sanidad española y global está viviendo un hito histórico en 2020, probablemente el más complejo de su historia. “Los trabajadores sanitarios nos hemos enfrentado a la situación, a pesar de todas las barreras y dificultades que hemos encontrado en el camino”, recordaron.
Además, este colectivo hace hincapié en que los MIR, personal en formación, “lo hemos vivido con especial ilusión, entendiendo este momento como una gran oportunidad de aprendizaje y crecimiento profesional, dejando a un lado el miedo y la incertidumbre. Por el camino hemos tenido que lamentar terribles noticias, compañeros infectados y fallecidos. Sin embargo, a pesar de nuestro incansable esfuerzo por parte de las autoridades seguimos sintiéndonos maltratados y desprotegidos”.