Asociaciones y colectivos sociales de Cantabria han lanzado un mensaje de esperanza frente al suicidio, la primera causa de muerte no natural en el mundo y el mayor problema de salud mental de la Unión Europea, pero que sin embargo es «una realidad silenciada».
Lo han hecho durante el acto de celebración del Día Mundial de la Salud Mental dedicado a la prevención del suicidio y bajo el lema ‘Conecta con la vida’, que ha congregado en la plaza del Ayuntamiento de Santander a representantes de la Asociación Cántabra Pro-Salud Mental (Ascasam), impulsora del evento, del Centro Hospitalario Padre Menni de Santander, Proyecto Hombre, Fundación Acorde y Adaner así como a numerosos representantes políticos, pacientes y familiares.
Todos han coincidido en que lanzar un mensaje de esperanza, en afirmar «hay una salida» al suicidio, que se cobra la vida de más de 800.000 personas cada año en el mundo, y en es la «conexión», el poder hablar sobre ello porque «hablar del suicidio es la mejor forma para poder combatirlo».
El evento ha comenzado con la lectura de un manifiesto del Comité Nacional Pro Salud Mental y una proclama, durante las cuales han reivindicado un abordaje transversal del suicidio, que incluya medidas y medios suficientes para la prevención, diagnóstico y tratamiento de estas personas que «se encuentran en una situación límite».
Han recordado que es la principal causa externa de mortalidad en España y han solicitado atender este problema de forma responsable y respetuosa. Por último, han instado a la sociedad en general a participar en las actividades organizadas para prevenir y atajar el suicidio, «el mayor problema de salud pública a nivel estatal y europeo».
Según datos expuestos durante la conmemoración de este día, en España se suicidan unas 10 personas al día, siendo la primera causa de muerte no natural en el país desde hace doce años.
El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, se ha sumado a la conmemoración y ha hecho un llamamiento social para hablar, escuchar y apoyar más a las personas que sufren estas enfermedades y que se sientan así comprendidas y totalmente integradas.
«El que tiene un problema mental necesita que se le escuche, necesita que se le dé apoyo, que se le dé un estímulo», ha afirmado al presidente, que ha instado a la sociedad cántabra en general a «volver a hablar» y «contar los problemas y nos los cuenten».
Revilla ha apelado además a eliminar los estigmas contra las personas que sufren enfermedades mentales, porque, a su juicio, «no hay peor remedio que el aislamiento y el rechazo social».
Frente a ello, ha insistido en la necesidad de prestarlas un apoyo cercano y cariñoso. «Es lo que tenemos que hacer, ellos lo necesitan y nosotros se lo podemos dar con una palmada, con un abrazo, con una sonrisa, con un baile», ha señalado el presidente, tras recordar el que realizó hace justamente un año en la conmemoración de esta jornada para sensibilizar sobre la realidad de este colectivo y reclamar su inclusión social.
Por su parte, la alcaldesa de Santander, Gema Igual, ha asegurado que, frente a los problemas, «siempre hay una solución» y «aunque la vida sea difícil, se puede pedir ayuda».
Además, dada la «magnitud» del problema, ha reclamado un plan nacional, «reforzado» por la Consejería de Sanidad, y en el que participarían las administraciones locales como el Ayuntamiento de Santander.
Igual ha concluido su intervención recordando que hay once veces más muertes por suicidio que por homicidio y que suponen el doble de víctimas que los accidentes de tráfico.
El acto, en el que han estado presentes, entre otras autoridades y representantes políticos, los consejeros de Sanidad y de Educación, Formación Profesional y Turismo, Miguel Rodríguez y Marina Lombó, respectivamente, se ha cerrado con la actuación del coro infantil del Colegio San José, que ha interpretado ‘Viento del Norte’ de Nando Agüeros, junto con el presidente Revilla, y ‘Qué bonita la vida’ de Dani Martín.