Los secretarios generales de CCOO y UGT, Carlos Sánchez y Mariano Carmona, respectivamente, han valorado la situación del vigilante de Correos que no detectó las cartas con amenazas -y balas- dirigidas al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska; a la directora de la Guardia Civil, María Gámez; y al exvicepresidente segundo del Gobierno y candidato de Unidas Podemos en las elecciones a la Comunidad de Madrid, Pablo Iglesias.
Carmona ha considerado «indecente» que se ponga el foco de atención sobre un empleado, que prestaba servicios a través de una subcontrata y para el que la empresa postal ha pedido su destitución inmediata, cuando a su juicio «la máxima responsable» es la administración por la externalización de servicios para un «abaratamiento» de costes.
Y Sánchez ha manifestado que no se puede «señalar con el dedo» a un trabajador, cuando lo sucedido es «consecuencia» de esas políticas de ajustes y de privatizaciones. «La culpa la tiene el sistema», es decir, «los mecanismos y responsables de gestionar los servicios públicos», ha sentenciado para concluir.
CANDIDATA DEL PP A LA PRESIDENCIA DE LA COMUNIDAD DE MADRID
A la presidenta de la Comunidad de Madrid y candidata del PP a la reelección, Isabel Díaz Ayuso, le gustaría saber a quién han puesto al frente de la seguridad de algunas de las instituciones porque a ella le llegan a mandar a su despacho directamente, «pasando por el escáner de la Real Casa de Correos», aunque sea «un abrelatas de una lata de mejillones» y el responsable de seguridad de la Puerta del Sol «no vuelve a su puesto de trabajo».