El Rey presidió este lunes en el Congreso la Sesión Solemne de Apertura de la XIV Legislatura con un discurso en el que hizo diversas apelaciones al diálogo, siempre dentro de la Constitución, y que recibió el aplauso de los ministros de Unidas Podemos que integran el Gobierno, entre ellos de Pablo Iglesias y de Alberto Garzón. Como en ocasiones anteriores, los independentistas volvieron a ‘plantar’ al Jefe del Estado no acudiendo a este acto, pero esta vez escenificaron su boicot reclamando unidos que la Monarquía se aparte de la política.
Los Reyes y sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, llegaron a la sede del Parlamento poco antes de las doce del mediodía y, en el cruce de la Carrera de San Jerónimo con Cedaceros, Don Felipe y Doña Letizia, fueron recibidos por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el Jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), general del Ejército del Aire Miguel Ángel Villaroya.
En la Carrera de San Jerónimo estaba formado el Batallón de Honores, cuatro compañías de los Ejércitos de Tierra, Armada, Ejército del Aire y Guardia Civil con bandera, escuadra de gastadores. El Jefe del Estado recibió honores militares y pasó revista al Batallón de Honores acompañado por el JEMAD, el Almirante Jefe del Cuarto Militar de la Casa de Su Majestad el Rey y el Teniente Coronel Jefe del Batallón.
DE LAS POCAS VECES QUE SE ABRE LA PUERTA DE LOS LEONES
A continuación, la comitiva se dirigió a la escalinata del Palacio del Congreso, donde fue recibida por las presidentas del Congreso, Meritxell Batet, y del Senado, Pilar Llop, y por los miembros de las mesas de ambas cámaras. Para esta ocasión se abrió la Puerta de los Leones –que sólo se utiliza en los actos a los que acude el Jefe del Estado y en las Jornadas de Puertas Abiertas–, desde donde el cortejo entró en el Vestíbulo de Isabel II para dirigirse posteriormente al hemiciclo a través del Salón de Pasos Perdidos.
El presidente del Gobierno y sus ministros ocuparon los escaños del banco azul tras un primer lío inicial de algunos de ellos que desconocían cuál era ahora su sitio, e hicieron lo propio los miembros de las Mesas del Congreso y del Senado.
En el hemiciclo estaban diputados y senadores y en las tribunas se ubicaron las autoridades invitadas. Entre otros se pudo ver a los presidentes del Tribunal Constitucional, Juan José González Rivas, y del Tribunal de Cuentas, María José de la Fuente, así como al Defensor del Pueblo, Francisco Fernández Marugán, y a la presidenta del Consejo de Estado, María Teresa Fernández de la Vega.
DOS PADRES DE LA CONSTITUCIÓN, ENTRE LOS ASISTENTES
A esta ceremonia solemne también acudieron los expresidentes del Congreso Federico Trillo, Jesús Posada y Luisa Fernanda Rudi; los dos ‘padres’ vivos de la Constitución Miquel Roca y Miguel Herrero Rodríguez de Miñón; la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel García Ayuso, y el alcalde de la capital, José Luis Martínez Almeida.
Ésta ha sido la primera vez que Felipe VI preside un acto de esta solemnidad con un Gobierno de coalición en el banco azul, con ministros del PSOE y de Unidas Podemos, y ante un Parlamento con más grupos de corte secesionista que en legislaturas precedentes, aunque ERC, Junts, Bildu, el BNG, y la CUP no quisieron acudir.
Eso sí, una hora antes del inicio de la Apertura Solemne, estos partidos leyeron un manifiesto en el que exigían romper con la Monarquía española y avisaban de que «sólo así se podrá dar cauce a soluciones basadas en el respeto a la voluntad popular, la libertad y la democracia».
Los asistentes, puestos en pie, aplaudieron al Monarca y su familia al entrar en el hemiciclo. A diferencia de lo que ocurrió en 2016, esta vez los líderes de Podemos Pablo Iglesias e Irene Montero, y el coordinador general de IU, Alberto Garzón, sí aplaudieron al Jefe del Estado, pero ahora desde el banco azul del Gobierno. Por contra, el grueso de parlamentarios de Unidas Podemos y la representación del PNV encabezada por su portavoz, Aitor Esteban, prefirieron quedarse en pie sin dar palmas.
EL «VIVA EL REY» DE MERITXELL BATET
A continuación, tras sonar el Himno Nacional, la presidenta del Congreso abrió la Sesión Solemne pronunciando un discurso en favor del diálogo que acabó con un ‘Viva el Rey’ y un ‘Viva la Constitución’ también muy aplaudidos en el Salón de Plenos. Después le tocó a Felipe VI, quien se dirigió a las Cortes Generales pidiendo acabar con el «unos contra otros» y llamando al diálogo teniendo como «base firme» la Carta Magna: «Es la hora de la palabra y del acuerdo», dijo, dando por iniciada la XIV Legislatura.
Su discurso fue apoyado con un prolongado aplauso y tres vivas al Rey, España y la Constitución lanzados por la diputada gallega del PP Tristana Moraleja. De nuevo aplaudieron los miembros de Unidas Podemos en el Ejecutivo, mientras que la mayoría del grupo se negó a secundar la ovación.
Concluido el acto en el hemiciclo, Don Felipe y Doña Letizia y sus hijas se dirigieron al Salón de Pasos Perdidos para saludar, una a una, a los asistentes. Por el besamanos pasaron parlamentarios de todas las formaciones políticas presentes, aunque Unidas Podemos sólo estuvo representado por sus miembros en el Gobierno y su portavoz parlamentario, Pablo Echenique.
Posteriormente, los Reyes, las autoridades y los parlamentarios se dirigieron a la conocida como Puerta de los Leones para presenciar el desfile militar protagonizado por la Agrupación de las Fuerzas Armadas y Guardia Civil. Acabado el acto, los Reyes se fueron de la Carrera de San Jerónimo en el Rolls Royce negro que Patrimonio reserva a la Corona.