El retraso en la tramitación de las autorizaciones ambientales para ampliar la actividad de la planta de Santander Coated Solutions, del que distintos departamentos de la administración regional se han culpado mutuamente, ha llevado al Partido Popular (PP) de Cantabria a presentar una interpelación en el Parlamento de Cantabria, con el fin de conocer “los criterios del Gobierno de Cantabria en relación con la tramitación de las autorizaciones y ejecución de la inversión prevista en la planta de Santander Coated Solutions”. La interpelación, que fue registrada el 26 de febrero pasado, se debatirá en el pleno del próximo lunes 11 de marzo.
Pretende el PP conocer “quién ha sido responsable de este retraso, a qué motivos se debe y, sobre todo, si aun estamos a tiempo de evitar que Cantabria pierda esta inversión”, ya que las últimas informaciones apuntan a la posibilidad de que la actividad industrial que estaba previsto desarrollar en la región se desvíe finalmente a otras instalaciones del mismo grupo en la provincia de León, algo que, a juicio del PP, sería “un auténtico drama”.
“Es inadmisible que, por falta de agilidad en la concesión de las autorizaciones ambientales, Cantabria pueda perder una inversión que estaba llamada a crear doscientos puestos de trabajo”, apunta el diputado regional Iñigo Fernández. “Esta región no puede permitirse el lujo de perder doscientos empleos por que el Gobierno no tramita a tiempo las autorizaciones ambientales”.
Según el parlamentario regional del PP “alguien tiene que dar una explicación, porque el asunto es muy grave”. “Estamos ante un ejemplo más de un Gobierno que no funciona, en el que unas consejerías neutralizan lo que se hace en otras y en el que el presidente nunca está, nunca resuelve nada, nunca soluciona nada y se dedica a otras cosas que hacer que nada tienen que ver con las responsabilidades de su cargo”, afirma el diputado.
“Costó mucho trabajo traer a esta empresa en la anterior legislatura”, añade, y “ahora que pretende crecer, el Gobierno PRC-PSOE es inacapaz de resolver lo más sencillo, que es la concesión de los permisos”, añade.
“El consejero de Industria culpa a la de Medio Ambiente y esta contesta que ‘ningún consejero está por encima de la ley’. Entre tanto, el presidente está desaparecido, como siempre. Y el riesgo de perder doscientos empleos ahí sigue, como si a nadie le importara nada”, explica el diputado. “Una muestra más del fracaso de la coalición entre Revilla y Pedro Sánchez”, concluye