El Parlamento de Cantabria abordará el jueves la reapertura de los locales de ocio nocturno a partir de este fin de semana, en condiciones similares a las establecidas para la hostelería, es decir, hasta las 01:00 horas de la madrugada, y previa solicitud de un cambio de uso a los ayuntamientos, no de licencia.
Así se lo ha anunciado hoy el presidente regional, Miguel Ángel Revilla, a representantes del sector en el transcurso de la reunión que han mantenido en la sede de Peña Herbosa para tratar de buscar soluciones a uno de los colectivos más afectados por las restricciones derivadas de la pandemia.
«Hemos llegado hasta donde se puede llegar, entendiendo que esta no es la solución definitiva para un sector muy tocado», ha apuntado Miguel Ángel Revilla al término del encuentro. Según ha explicado, se ha buscado una «fórmula jurídicamente posible» para que estos negocios se conviertan en una modalidad de «bares mixtos» que puedan compaginar el servicio de comidas y la música, en condiciones similares a las que rigen actualmente en los establecimientos de hostelería.
Para ello, ha añadido, estos negocios solo tendrían que solicitar ese cambio de uso en sus respectivos ayuntamientos y comprometerse por escrito a cumplir con las medidas sanitarias, es decir, que no sería necesario un cambio de licencia, un trámite mucho más largo y complejo.
El jefe del Ejecutivo se ha solidarizado con la situación de los empresarios de un «sector importante en Cantabria» que atraviesa por una «situación económica tremenda» ante la imposibilidad de abrir sus locales y por los gastos fijos que siguen teniendo que soportar.
Tras recordar que las medidas en tiempos de pandemia corresponden a Sanidad y que es obligación de todos acatarlas, incluido el presidente, Revilla ha asegurado que Cantabria está en estos momentos en una situación que permite adoptar decisiones «en aras a ir dulcificando medidas drásticas que se han tenido que tomar» en determinados ámbitos, como es el caso del ocio nocturno.
«No podemos cantar victoria, porque no sabemos lo que puede pasar mañana. Hemos tenido una preocupación hace 20 días por la avalancha de gente, que nos subió el pico de contagios, pero llevamos 2 semanas en una situación buena en relación al conjunto de España, lo cual no nos garantiza que no podamos tener otro brote», ha apuntado.
Por su parte, Ángel Suárez, en representación de los empresarios del ocio nocturno, ha valorado que esta medida es «un primer paso» para reactivar el sector, si bien calcula que únicamente podrán acogerse a ella un 10% de los establecimientos, debido la dificultad que supone adaptar los locales (muchos de los cuales no disponen de terrazas), trabajar con un concepto y en un horario distintos a los habituales y en competencia, además, con el resto de locales hosteleros.
«No es una solución, ni muchos menos, pero sí es un primer paso y lo vemos de buen grado, porque todo lo que sea ayudar, aunque sea a un porcentaje mínimo del sector, con lo dañados que estamos, es una buena noticia», ha afirmado.
Al igual que el presidente Revilla, ha defendido que la situación de Cantabria no es equiparable a la de otros lugares de España y que las restricciones en el ámbito del ocio nocturno no pueden ser generales para todo el país. En este sentido, ha pedido que se regularice la actividad del sector, que se fije un protocolo que garantice la seguridad de los clientes o, en su defecto, paquetes de ayuda específicos para los empresarios.