El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha convocado este domingo un Consejo de Ministros extraordinario para previsiblemente declarar el estado de alarma, después de que se lo hayan pedido diez Ejecutivos autonómicos –seis de ellos, del PSOE–, con el objetivo de tener cobertura jurídica suficiente para endurecer las restricciones de movilidad y poder hacer frente al incremento de contagios de COVID-19.
El jefe del Ejecutivo afirmó este viernes a mediodía, en una declaración institucional desde el Palacio de La Moncloa, que está dispuesto a adoptar las medidas que haga falta para doblegar la curva de contagios. En su mensaje, también volvió a instar a las regiones que se encuentran en situación de alto riesgo a que solicitaran la aplicación de este instrumento para poder doblegar la curva.
Tras advertir de la gravedad de la situación, a las 11.00 horas de este sábado ya le habían pedido que diera este paso País Vasco, Cataluña, Cantabria, las comunidades gobernadas por el PSOE de Asturias, Extremadura, La Rioja, Navarra, Castilla-La Mancha y Comunidad Valenciana, así como la ciudad autónoma de Melilla.
De momento ninguna comunidad autónoma gobernada por el PP ha solicitado la declaración del estado de alarma, aunque por ejemplo Castilla y León sí ha recurrido a medidas drásticas como el toque de queda, y Madrid ha prohibido las reuniones entre no convivientes durante la noche.
El Gobierno no necesita el visto bueno del Congreso para aprobar el estado de alarma, pero sí para prorrogarlo más allá de los 15 días de vigencia inicial. Por ello, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, volvió a hacer este viernes un claro llamamiento al PP para que garantice su apoyo para prorrogar este instrumento y poder garantizar así una cobertura jurídica apropiada para medidas como el toque de queda. De momento, el Ejecutivo ya se ha asegurado el apoyo de Ciudadanos.
MÁS DE UN MILLÓN DE CONTAGIOS
La cifra global de contagios en España ya supera el millón –en concreto, se eleva ya a 1.046.132 desde el inicio de la pandemia–, y este viernes las comunidades autónomas notificaron al Ministerio de Sanidad 19.851 nuevos casos de COVID-19, 8.293 en las últimas 24 horas, lo que supone un ascenso con respecto a los 7.953 diagnosticados este jueves. Cataluña y Galicia han registrado en las últimas 24 horas récord de casos.
El presidente del Gobierno se encuentra este sábado en Roma con motivo de su audiencia con el Papa Francisco en el Vaticano. Aunque hace dos semanas delegó en su vicepresidenta primera, Carmen Calvo, el Consejo de Ministros extraordinario que declaró el estado de alarma «territorializado» para restringir la movilidad en la Comunidad de Madrid, ahora ha preferido esperar al domingo para presidir él mismo al reunión.
El jefe del Ejecutivo ha afirmado este viernes desde Moncloa que está «listo» para adoptar las medidas que sean necesarias y ha vuelto a instar a las comunidades autónomas que se encuentran en riesgo «extremo» a solicitar la declaración del estado de alarma cuando lo consideren necesario para seguir luchando contra la pandemia.
EL PLAN APROBADO CON LAS COMUNIDADES CONTEMPLA EL ESTADO DE ALARMA
El Gobierno y las comunidades aprobaron este jueves en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS) un plan de respuesta coordinada que incluye cuatro niveles de riesgo, con sus correspondientes medidas. En el nivel de alerta máxima se contempla expresamente la posibilidad de recurrir al estado de alarma para dar cobertura a medidas «excepcionales», tal y como ha recordado Sánchez en su comparecencia.
Tras superarse la primera ola del coronavirus, y decaer el estado de alarma iniciado en marzo por la progresiva pérdida de apoyos, Sánchez adoptó en verano una estrategia de «cogobernanza» con las comunidades, para que fueran ellas las que, en coordinación con Sanidad, se encargaran de gestionar la pandemia.
En esta línea, a finales de agosto puso a su disposición la posibilidad de solicitar la aprobación de un estado de alarma «territorializado» que sirviera como cobertura jurídica para aplicar medidas de movilidad más estrictas, si así lo consideraban necesario. En ese momento, Sánchez, ofreció a los presidentes autonómicos la posibilidad de acudir al Congreso a defender ellos mismos su petición.
El Gobierno ya recurrió hace dos semanas a la declaración de un estado de alarma «territorializado» para aplicar en la Comunidad de Madrid los confinamientos perimetrales en la capital y otros ocho municipios, ante la «preocupante» situación en la región, y la negativa del gobierno de Isabel Díaz Ayuso de atender las indicaciones del Ministerio de Sanidad.
De hecho, este estado de alarma, que se aprobó con medidas únicamente para Madrid, decae este sábado, ya que el Ejecutivo descartó prorrogarlo, consciente de que sigue sin contar con los apoyos necesarios para sacar adelante su continuidad en el Congreso, ante la negativa del PP.
CIUDADANOS GARANTIZA SU APOYO
De momento ya ha recibido el apoyo de Ciudadanos para decretar de nuevo ese el estado de alarma. La líder del partido naranja, Inés Arrimadas, ha llamado por teléfono a Sánchez este viernes para urgirle a que «tome el control» y aplique un plan nacional contra el coronavirus con medidas «contundentes» que eviten un nuevo confinamiento, ofreciéndole el apoyo de los diez diputados de Cs en el Congreso para aplicar el estado de alarma en caso de que sea necesario.
Sin embargo, aún contando con los apoyos de Ciudadanos y los del PNV, el Gobierno no tendría garantizada todavía la mayoría absoluta, por lo que tendría que asegurarse el voto de otros partidos.
La sexta y última prórroga del estado de alarma de marzo salió adelante el 3 de junio con 177 votos: los 120 del PSOE, los 35 de Unidas Podemos, los 10 de Ciudadanos, 6 del PNV, dos de Más País-Equo, y los de Coalición Canaria-Nueva Canarias, el Partido Regionalista de Cantabria (PRC) y Teruel Existe.