El diputado Alberto Bolado cree que la disolución del grupo Podemos «perjudica» a los «intereses electorales» del partido morado y a los cántabros y culpa a la, a su juicio, «tránsfuga» Verónica Ordóñez, que se compromete a «seguir trabajando» y representando al partido morado en el Parlamento desde su nueva condición de diputada no adscrita con las herramientas y las «capacidades» que «le dejen» y también «en la calle».
Así se han expresado ambos diputados después de que la Mesa del Parlamento haya acordado dar vía libre a la solicitud de Ordóñez de dejar el grupo parlamentario de Podemos, declarándola diputada no adscrita, una salida que ha provocado la disolución del grupo al no llegar al mínimo de parlamentarios que se precisan para tener grupo, que es tres, y quedarse solo con dos: Alberto Bolado y José Ramón Blanco, que pasan al grupo mixto.
Mientras que Bolado culpa a Ordóñez de la situación, ésta ha lamentado que ella, que sigue representando a Podemos, tenga que acabar como diputada no adscrita y sufrir «penalidades» a la hora de realizar su trabajo futuro, al tener menos representación en las comisiones y capacidad de presentar iniciativas, mientras Blanco y Bolado que «no representan al partido» tras declararse «en rebeldía» vayan a tener «más facilidades» en el grupo mixto.
Y es que, a juicio de la ya diputada no adscrita, en este sentido considera que el reclamento del Parlamento de Cantabria es «injusto». Pese a ello, se ha comprometido a «seguir trabajando en la misma línea» que hasta ahora lo ha hecho y a las «órdenes» de Podemos. Además de seguir con su labor en la Cámara, ha señalado que política no solo se hace desde el Parlamento sino también «en la calle» y trabajando con los distintos colectivos sociales.
Aunque aún no están concretadas las funciones y capacidades de Ordóñez en su nuevo puesto, sí se sabe ya que Ordóñez solo podrá tener voto en una de las comisiones.
Sin embargo, la diputada ha explicado a esta agencia que, aunque sin voto salvo en una, podrá asistir al resto de comisiones, algo que, según ha dicho, tiene previsto hacer. Además, ha señalado que, incluso, podría intervenir con el permiso de la presidenta de la comisión.
Además, la labor de Ordóñez se verá limitada a la hora de plantear algunas iniciativas ya que, por ejemplo, según ella misma ha señalado, no podrá presentar proposiciones no de ley, aunque sí por ejemplo preguntas. Además, aún hay «dudas» sobre si podrá plantear interpelaciones a los miembros del Gobierno, algo que los servicios jurídicos de la Cámara están consultando con otros parlamentos autonómicos donde pueda haber una situación similar.
La propia Ordóñez ha reconocido que su situación es «muy rara» porque no es diputada no adscrita por haber sido expulsada de su partido, sino que al contrario, sigue representando a Podemos, pero desde esta condición.
Todos estos cambios afectarán a raíz de la situación de Podemos y motivada por los enfrentamientos entre sus diputados, entre otras circunstancias, provocarán otros cambios en la organización y el trabajo en el Parlamento en estos últimos meses de legislatura.
Y es que, según Bolado, tendrán que retocarse cuestiones en próximas Mesas –la siguiente prevista para finales de mes– como, por ejemplo, el número de integrantes de las comisiones; recomponer a los integrantes de cada mesa en las mismas al perder los hasta ahora integrantes del grupo morado sus cargos en las mismas.
Además, el Parlamento también tendrá que nombrar un nuevo secretario primero de la Mesa, puesto que hasta ahora recaía en Bolado y del que ha sido cesado este mismo martes.
Desde la Cámara, explican que el reglamento de la Cámara establece que los miembros de la Mesa deben cesar al dejar de pertenecer al grupo parlamentario de la formación política que les propuso para el cargo».
EL GRUPO MIXTO
Además, los acuerdos adoptados este martes por la Mesa de la Cámara también afectan ahora al grupo mixto, al que hasta ahora pertenecían el diputado de Ciudadanos (Cs), Rubén Gómez, y Juan Ramón Carrancio, ex de la formación naranja, y al que ahora se sumarán Bolado y Blanco.
Blanco ha explicado que «esta semana» él y Bolado tienen previsto reunirse con Gómez y Carrancio para preparar unas nuevas normas de funcionamiento del grupo.
La Mesa del Parlamento les ha dado un plazo un plazo de diez días para ello pero Bolado ha señalado que este mismo martes tiene intención de concretar una reunión para abordar este asunto, en el que considera que «lo ideal» sería llegar a «un consenso» con acuerdos «legítimos y lógicos».