Cantabria registró a 31 de julio un déficit de 132,8 millones de euros, según la resolución de la Intervención General por la que se hacen públicos los estados de ejecución del Presupuesto de la Administración de la Comunidad Autónoma, las modificaciones a los mismos, así como los movimientos y situación de la Tesorería publicada en el Boletín Oficial de Cantabria (BOC).
Los datos correspondientes al séptimo mes del año muestran que Cantabria ingresó 1.257,8 millones y gastó 1.390,68 con lo que contabilizó un déficit del 1,02% del Producto Interior Bruto (PIB).
Estos datos de ejecución del presupuesto de Cantabria no incluyen las cuentas de las empresas públicas ni otras como las de la Universidad de Cantabria.
De los casi 1.258 millones que ingresó Cantabria hasta julio, la mayor parte corresponde a la recaudación por transferencias del Estado (329,38 millones) seguida de la recaudación por IVA, con 300,8 millones, del Impuesto sobre la Renta (293,57 millones) y los impuestos sobre consumos específicos (que gravan el alcohol, el tabaco y los hidrocarburos, entre otros), con 119,73 millones.
Por su parte, las políticas sanitarias concentraron la mayor partida de gasto en el séptimo mes del año, con 594,47 millones, seguidas de las de educación, con 375,34 millones. Además, a servicios sociales y la promoción social fueron casi 128,76 millones y a infraestructuras se dedicaron 117,65 millones. Con todo, la tercera partida más cuantiosa, 333,59 millones de euros, fue para la deuda pública.
Además, el Ejecutivo contrató préstamos por 391,53 millones y amortizó 361,65 millones de deuda, con lo que el endeudamiento de la comunidad autónoma se situó en 3.004,5 millones, un casi un 4,9% más que en enero, cuando ascendía a 2.863 millones.