El precio de la vivienda en España ha aumentado un 9% en el último trimestre de 2018 con respecto a finales de 2017, situando el precio medio en 1.338 euros, según el Informe de Vivienda de Gesvalt correspondiente al último trimestre del año, que indica que en Cantabria el incremento ha sido medio punto mayor, del 9,5%.
Por comunidades, el mayor incremento en el precio de la vivienda se ha producido en Canarias, con un aumento del 11,5%. Le siguen Baleares (10,8%), Cataluña (10,6%), Madrid (9,9%) y Cantabria (9,5%).
Completando el ‘top 10’ en los mayores incrementos, se encuentran Navarra (9,2%), Comunidad Valenciana (8,1%), Castilla La Mancha (7,6%), La Rioja (7,5%) y Andalucía (5,6%).
Las autonomías de Asturias y Extremadura se han mantenido prácticamente estables respecto a 2017 en lo relativo al precio de la vivienda, con un incremento del 0,7% en el caso de Asturias y un descenso del 0,35% en Extremadura.
Con respecto al número de transacciones, durante 2018 se han realizado un total de 410.883 frente a las 265.062 hipotecas concedidas.
MODERACIÓN EN LOS PRECIOS DEL ALQUILER
El alquiler, por su parte, continúa al alza en España, pero los precios presentan una cierta moderación. Las ciudades más caras a cierre de 2018 son Barcelona, con un precio de 19,05 euros por metro cuadrado al mes, Madrid (17,50 euros por metro cuadrado al mes) y San Sebastián (16,56 euros por metro cuadrado al mes).
Además, el estudio revela que en ciudades limítrofes a las principales capitales, la demanda del alquiler ha aumentado y se han visto incrementos en los precios de ciudades como Casteldefells, registrando un precio de 14,85 euros por metro cuadrado al mes, Hospitalet de Llobregat (14,4 euros por metro cuadrado al mes) o Majadahonda (11,91 euros por metro cuadrado al mes).
Por el contrario, sin superar los seis euros por metro cuadrado al mes para alquilar una vivienda de características medias, se encuentran Zamora, Lugo, Ciudad Real y Cáceres.
Según la directora general de Gesvalt, Sandra Daza, «los últimos datos apuntan a una moderación de los precios, especialmente en las grandes ciudades, donde podrían estar cerca de tocar techo».