La presidenta del PP de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, «no aprueba» ni justifica los «insultos» y «faltas de respeto» al jefe del Ejecutivo regional, Miguel Ángel Revilla (PRC), en la concentración de los hosteleros de ayer, martes, en Astillero pero «comprende» la protesta «que viene a expresar la desesperación del sector» ante la «injusta, desproporcionada y evitable» decisión de volver a cerrar el interior de la hostelería.
«Miguel Ángel Revilla se está equivocando gravemente permitiendo un cierre (del interior) de la hostelería que él, como el resto de presidentes autonómicos, puede impedir», ha afirmado Buruaga en una rueda de prensa en la que ha vuelto a expresar el desacuerdo de su partido con esta medida, en vigor de nuevo desde hoy, «en este momento y en estas condiciones».