El presidente del Principado, Adrián Barbón, considera que las compensaciones conseguidas por los errores en el contrato para la renovación de parte de los trenes de ancho métrico responden a un «buen acuerdo» que supone un «punto de no retorno» para la red de Cercanías de la comunidad. «Ojalá no hubiese tenido que pactar compensaciones ni haber tenido que vivir esta situación bochornosa que indigna a cántabros y asturianos», pero con el acuerdo alcanzando con el Ministerio de Transportes han quedado claras «cuestiones claves», ha señalado al responder en el pleno de la Junta General a una pregunta formulada por la portavoz de Foro, Adrián Pumares.
Barbón ha detallado que, fruto del acuerdo firmado con el Ministerio de Transportes, se consiguió la gratuidad de Renfe y Feve hasta 2026, la integración tarifaria, una renovación de la malla horaria, que se vaya a renovar toda la flota de ancho métrico y que el plan de Cercanías llegue a los 1.100 millones de inversión.
«Todo es mejorable», ha reconocido, pero en esta negociación ha quedado demostrada la fuerza de Asturias, junto a Cantabria, y que ha defendido los intereses de la comunidad por encima de su «simpatía política» y demostrado así que es libre. Hasta el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, «que ha negociado multitud de acuerdos» en los dieciséis años que lleva ocupando el cargo y los ocho que ha estado como vicepresidente le dijo, según ha afirmado Barbón, «que había sido una de las mejores negociaciones que recordaba». Para Pumares, sin embargo, el Gobierno asturiano ha perdido la oportunidad de hacer realidad el ferrocarril que necesita Asturias a medio y largo plazo y rediseñar su futuro y se ha conformado con conseguir la gratuidad y más trenes que no van a responder a las necesidades de la sociedad asturiana ni a sus demandas.
El portavoz forista ha asegurado, además, que aún se desconoce la cadena de errores que provocó esta situación o los mecanismos que se han puesto en marcha para evitar que se produzca en el futuro otra situación bochornosa como esta. En su opinión, «Barbón queda tocado» en esta negociación por haber defendido a la secretaria de Estado de Transportes Isabel Pardo de Vera, «a quien forzó su dimisión el Gobierno de España», cuando, en su opinión, la responsabilidades políticas deberían haber hecho dimitir a la ministra, Raquel Sánchez, informa Efe y publica http://lavozdeasturias.es