Unidas por Santander (UxS) propone estudiar la viabilidad de la puesta en marcha de un futuro sistema de aprovechamiento y abastecimiento de agua para la capital, con el objetivo de almacenar, tratar y destinar el agua regenerada para actividades industriales o de riego. Para ello, la formación ha presentado una moción para el pleno de febrero en la que piden que, en el plazo de un mes, se convoque una Mesa Municipal del Agua que cuente con la presencia de representantes vecinales, grupos municipales y diferentes administraciones y concesiones competentes en gestión de agua en Santander, para consultar todos los recursos que puedan usarse en una de las necesidades más importantes para el futuro de Santander, la independencia hídrica.
La idea es presentar, en un máximo de seis meses, un estudio económico y un plan piloto que contemple, a su vez, la sustitución de pavimentos y vías impermeables por pavimentos permeables, preferentemente vegetales, para que faciliten el abastecimiento y uso del agua de lluvia y evitar así que esta se filtre al alcantarillado y se mezcle con residuos y otras aguas de diferentes calidades. “Partimos de la base de que la gestión del agua en Santander ha sido tan negligente que el Plan General fue anulado por el Tribunal Supremo porque el Ayuntamiento no había planeado cómo obtener suficientes recursos para abastecer a una ciudad en constante crecimiento, tal y como era su previsión para 2024”, ha recordado el concejal de UxS, Miguel Saro. De hecho, Saro concuerda en que, actualmente, “tenemos una insostenible dependencia del abastecimiento que nos dan cuencas como la del Ebro, y esto solo se agudizará con el tiempo y generará un conflicto social aún mayor en el futuro”.
La propuesta de la moción parte de un proyecto de IU Santander, cuyo Coordinador, Keruin Martínez, ha planteado la necesidad de “dejar de desaprovechar los recursos a nivel local” y reutilizar esta agua residual para aquellos fines que no necesitan tanto tratamiento previo como el agua de consumo humano, “especialmente el uso industrial y el riego agrícola o de zonas verdes, incluso la limpieza viaria”.
El proyecto permitiría movilizar y tratar el volumen de agua pluvial con un sistema de drenaje centralizado que mezcle el agua de lluvia con el agua residual, y cuyo uso podría ser de una gran utilidad para muchos de los servicios municipales. “Somos conscientes de que son actuaciones que deben pensarse a largo plazo, ya que requiere mejorar el sistema de drenaje a través de sistemas urbanos de drenaje sostenible, con elementos superficiales y permeables, como jardines de lluvia, ecocunetas, sumideros filtrantes o canales permeables”, ha explicado Martínez, que ha propuesto partir de lo que ya se ha hecho en el humedal de Las Llamas y convertirlo en punto de partida para la renaturalización.
El proyecto también contempla la necesidad de diseñar un Plan piloto de Jardines de Lluvia y jardines verticales para crear un sistema de infraestructuras verdes, y otro para desarticular parte del asfaltado y sustituirlo por suelos permeables; así como la instalación de nuevos tanques de tormentas o tanques de agua en zonas rurales, lo que reduciría la dependencia de aguas del pozo para riego.
“Se trata de una idea ambiciosa, transformadora y de calado, para el que se precisa la participación pública vecinal”, ha concluido Saro, por lo que propone la creación de una Mesa Municipal de Agua, ya que ha lamentado la ausencia de una herramienta de este tipo tras el abandono del Consejo Municipal de Sostenibilidad “cuya última reunión fue en julio de 2020 por propuesta de UxS y la anterior a esta fue en 2016”, lo que, en su opinión, le ha convertido en un órgano “absolutamente inoperante, como cualquier herramienta de participación de este Ayuntamiento gestionada por el PP”.