VOX Santander ha presentado 6 alegaciones al proyecto de modificación de la Ordenanza municipal sobre tenencia de perros y otros animales domésticos. El portavoz de la formación, Guillermo Pérez-Cosío, ha explicado que no entiende tanta “premura” en sacar adelante esta reforma cuando todavía está tramitándose el anteproyecto de Ley de Protección y Bienestar Animal de Cantabria y, en un ámbito nacional, el proyecto de Ley de Protección, Derechos y Bienestar de los Animales; disposiciones que a buen seguro introducirán cuestiones que obligarán a modificar de nuevo la Ordenanza”.
Por otro lado, el edil señala que “no deja de sorprender que cuando hay que enfrentarse a los postulados globalistas de la ‘cultura de la muerte’ que tratan de imponerse a los seres humanos (aborto y eutanasia) junto con la obsesión climática, la igualdad de género o la obligada disminución de la población mundial, sus mismos defensores pretendan humanizar a los animales y dotarlos de derechos revistiendo a las especies de un carácter antropomórfico en todo lo relativo a su tratamiento”. Esta equiparación carece de sentido alguno porque “los animales no pueden ser sujetos de derechos ni tampoco de obligaciones”, apunta Guillermo Pérez-Cosío.
En otro punto, VOX muestra su oposición a la modificación que busca hacer posible el acceso de animales a los medios de transporte público de personas y no solo por razones “higiénico-sanitarias o zoosanitarias”, sino por el “temor que despiertan a una parte no pequeña de la población, especialmente la infantil y de mayor edad, que utiliza dichos medios de transporte”. Para el concejal de VOX “es sorprendente” que las mismas razones que anteriormente se contemplaban en la Ordenanza para establecer la prohibición actual, “ahora se utilizan para permitir el acceso de animales al transporte público colectivo”.
Además, en determinadas situaciones de “mal comportamiento animal”, la presencia de estos puede constituir un “riesgo para la seguridad” de la conducción de vehículos de transporte público guiados por particulares que puede llegar a afectar tanto a los usuarios de esos medios de transporte como a terceros. “La única excepción que aceptamos son los perros guía o perros lazarillo”, puntualiza. Asimismo, el portavoz de VOX se muestra contrario a permitir el acceso de animales a edificios públicos y dependencias administrativas y a bares, cafeterías y establecimientos hoteleros, “salvo en aquellos casos en que dispongan bien visible de un cartel anunciando que permiten la entrada o de animales para así evitar sorpresas en su interior”.
Pérez-Cosío también indica que la Ordenanza “debería contemplar la posibilidad de limitar el acceso de perros a algunas zonas y plazas de Santander para garantizar que aquellos a los que no les gustan los animales tengan espacios en los que estar tranquilos”. En la quinta alegación presentada desde VOX se señala que carece de sentido que la prohibición de circulación o permanencia de perros y otros animales en “piscinas” se quiera limitar a la temporada de baño y no tenga carácter permanente todo el año. En lo referente a las playas, el edil sostiene que ·la prohibición actual no puede quedar limitada a horas y lugares, sino mantenerse las 24 horas durante las fechas en la que se lleva a cabo el disfrute de los arenales por la ciudadanía y que coincide con la época estival”.
Por último, Pérez-Cosío propone que se dote de mayor efectividad a la obligación de recoger los excrementos animales de la vía pública, haciendo en todo caso responsables de su recogida a los dueños de los animales. “Nuestras alegaciones son realistas y sirven para garantizar la convivencia entre animales y personas sin molestias ni sobresaltos y defiende un endurecimiento de las sanciones para los casos de maltrato animal o de abandono”, ha sentenciado el concejal de VOX, Guillermo Pérez-Cosío.