El grupo municipal regionalista en el Ayuntamiento de Santander propondrá que el Consejo del TUS estudie la propuesta de que la Tarjeta Joven se amplíe de 25 a los 30 años de edad, al objeto de que los jóvenes con menos recursos puedan beneficiarse de la gratuidad del transporte urbano de acuerdo con la realidad social de la juventud y los estándares europeos.
Con esta medida se pretende estirar un rango de 5 años para que se puedan beneficiar de dicha bonificación los menores de 30 años, en la misma línea que se ofrece a los mayores de 65 años. “Queremos que el servicio sea gratuito para que los menores de 30 años que tengan unos ingresos anuales inferiores a 1,5 veces el IPREM y a tres veces el IPREM si está casado o es pareja de hecho, puedan beneficiarse y más en este contexto, que puede resultar tremendamente favorecedora en el objetivo de promover la cultura de la movilidad sostenible desde la juventud”, explicó el concejal, Jesús Goñi.
Una gratuidad que también pretende se haga extensiva para aquellas personas que tienen unos ingresos anuales inferiores al 1,5 veces el IPREM en el caso de viudos/as o solteros/as, y que en el caso de matrimonio o parejas de hecho, cuando los ingresos de ambos sean inferiores a tres veces el IPREM, teniendo también derecho a la tarjeta los cónyuges, “pues con este tipo de medidas pretendemos dar respuesta a las necesidades de movilidad de las personas con menos recursos y proponer un modelo de movilidad sostenible en la ciudad desde la juventud”.
Igualmente, el PRC plantea reducir el plazo de encontrarse en situación de desempleo de 1 año a 1 mes para poder ser beneficiario de la Tarjeta desempleado que da también acceso gratuito al servicio público. Del mismo modo y con los mismos criterios que para las personas mayores y los que se proponen en la tarjeta joven, quieren que se extienda la gratuidad para las personas con una discapacidad igual o mayor del 33%.
“Consideramos que debemos proteger a quienes peor lo están pasando en esta crisis de precios, aliviando a las familias y garantizando el acceso a los servicios públicos y, además, promoviendo un cambio de paradigma hacia una movilidad sostenible de la ciudad, de una forma sensata y responsable”, concluyó Goñi.