El diputado y nuevo portavoz de Podemos en el Parlamento de Cantabria, Alberto Bolado, ha denunciado que la gestora aprobada anoche por la dirección nacional para dirigir el partido en la región es «de parte», ya que cuatro de los cinco miembros que la integran son «afines», de manera «visible», a la parlamentaria Verónica Ordóñez, que concurría a las primarias -paralizadas por un juez- para ser candidata morada a la Presidencia de la Comunidad en las elecciones de mayo.
Así, cree que el objetivo de este ‘equipo técnico‘ -como lo denomina la cúpula estatal de la formación- es «aupar a la dirección (autonómica) a los que perdieron las primarias en abril», es decir, a los alineados con Ordóñez, que entonces fue derrotada por la hasta ahora secretaria general de los podemitas cántabros, Rosana Alonso, apartada por Madrid de la carrera por ser cartel electoral.
En opinión de Bolado, «lo que no fueron capaces de ganar con votos» pretenden hacerlo ahora «a base de manipular y conspirar«, según ha manifestado en declaraciones a Europa Press.
El parlamentario y portavoz del grupo desde el pasado viernes, –fecha en la que promovió una reunión para cesar a Ordóñez de la Portavocía con el apoyo del otro diputado, José Ramón Blanco, al que su compañera y otras dos mujeres del partido denunciaron por acoso laboral– ha indicado que cuatro de los cinco integrantes de la gestora iban en la lista con la que la podemita concurría a las primarias.
Se trata de Mercedes González Reguilón, Pablo González de la Riva (ambos miembros del Consejo Ciudadano Autonómico), Rebeca Tombelle (asesora del grupo parlamentario) y Rosario Quintana (exconsejera de Sanidad por el PSOE, durante el primer Gobierno de coalición, entre 2003 y 2007).
Asegura que todos ellos, y de manera «visible» además, son del entorno de Ordóñez, mientras que el quinto integrante, Luis Sanabria, miembro del círculo de Piélagos, podría serlo también, aunque de manera más «invisible», ya que no se ha «significado en primera línea» a favor de la diputada y exportavoz parlamentaria.
Además, Bolado ha criticado que esos cuatro miembros aparecían también en el acta de la famosa reunión del círculo de Camargo en la que se estuvo «conspirando» contra la dirección de Podemos Cantabria para «intentar hacerla caer» y, a la postre, «hacerse con el control» del partido, como pretenden ahora con la gestora nombrada «ilegítimamente», ha remachado.
Bolado ha reiterado que el grupo parlamentario no reconoce la autoridad de este equipo técnico, decidido por Madrid después de que la dirección cántabra acordara suspender cautelarmente de militancia a Blanco y Ordóñez, por las actitudes y comportamientos de ambos a raíz de la denuncia por acoso laboral, interpuesta también por la líder de Podemos Santander y una extrabajadora del partido.
Así, en la Cámara se van a «ceñir», ha avisado, a las instrucciones de la última secretaria general de Podemos Cantabria y del Consejo Ciudadano autonómico, elegidos en las primarias de abril, así como al documento político y programa aprobados entonces.
Por lo demás, Alberto Bolado ha criticado que el grupo parlamentario no ha recibido «ni una llamada» ni ha tenido tampoco ningún «contacto» con la cúpula estatal o con la gestora nombrada en Cantabria, pese a la «mano tendida» y disposición al «diálogo» mostrado con motivo del relevo en la Portavocía.
Con todo ello, el portavoz morado en el Legislativo cree que en Madrid les «importa más» tener gente «dócil y manejable» en Cantabria, y ha citado a modo de ejemplo a Rebeca Tombelle, asesora del grupo y «brazo derecho» de Ordóñez, además de expresidenta de la Comisión de Garantías. Ha asegurado que es la persona que ha estado «en contacto» con la dirección estatal para «dinamitar» Podemos Cantabria.