El equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Colindres, con su alcalde a la cabeza, Javier Incera (PSOE) ha decidido una congelación de las Ordenanzas Fiscales de cara al año 2022.
Esta decisión implica que los principales impuestos que pagan los vecinos de Colindres, se mantendrán invariables. El impuesto de Bienes Inmuebles –IBI-, Plusvalía, Impuesto de Actividades Económicas –IAE-, Impuesto sobre Vehículos e Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras –ICIO-) y, con carácter general, las tasas, precios públicos y tarifas, salvo la necesaria adaptación de alguna de éstas a la evolución de los precios por las distintas exigencias contractuales.
Cabe recordar que ya en este año, el Ayuntamiento decidió rebajar el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) de carácter urbano aplicando un tipo del 0,444, situándose en un valor muy cercano al mínimo aplicable que permite el Estado, que es el 0,4. Además, a todas las viviendas de carácter social del municipio se les aplica una bonificación del 50% en el impuesto. Por otra parte, en cuanto al IBI aplicable a los bienes de carácter rústico, el Ayuntamiento lo rebajó en un 5.5 %.
La intención del equipo de Gobierno con esta congelación de las tasas e impuestos es contener la carga fiscal, ayudar a favorecer el consumo de las familias y aliviar, en la medida de lo posible, las cargas económicas de los vecinos. “Sabemos que la situación sigue siendo complicada aún para muchas familias que se han visto afectadas por el duro momento económico que estamos viviendo”, ha explicado el concejal de economía, Alberto Echevarría.
Esta decisión se suma a otras que viene aplicando el Ayuntamiento desde que comenzara la crisis de la Covid 19, como son los bonos destinados al consumo en el comercio y la hostelería local o las ayudas a las PYMES y autónomos que se han gestionado en el último año. Además del aumento de las partidas económicas destinadas a servicios sociales, ayudas de emergencia, limpieza y desinfección de centros educativos y medidas de prevención frente a la covid-19.
Incera ha apuntado que “esta congelación impositiva se suma al resto de medidas de carácter municipal que hemos ido poniendo en marcha; nuestro objetivo sigue siendo proteger a las familias y propulsar la economía local en tiempos de dificultad como los que estamos viviendo”. En ese sentido, ha añadido que “es el momento en el que el Ayuntamiento debe hacer un nuevo esfuerzo por lograr unas cuentas municipales saneadas y seguir ofreciendo servicios públicos que mejoren la calidad de vida de los vecinos y hoy, esto hay que hacerlo sin que las familias aporten más”.