El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha asegurado hoy que la conexión ferroviaria de la Comunidad Autónoma con el Corredor Atlántico está garantizada vía Palencia, una vez que las obras del tren de alta velocidad son ya “una realidad, por lo que ha llamado a “hacer fuerza”, especialmente el Gobierno de España, para lograr la inclusión en la planificación europea del tramo Santander-Bilbao, que sería más competitivo en distancia y tiempo en la comunicación con Europa.
Revilla, que ha comparecido en rueda de prensa con los consejeros de Presidencia, Paula Fernández, y de Transporte, Javier López Marcano, para informar de su reciente visita a Bruselas para reclamar ante las instituciones comunitarias la inclusión de esta conexión en la red básica ferroviaria, ha recalcado que la región no se va a quedar fuera del Arco Atlántico, con el que estará conectada por el mismo eje que Asturias y Galicia.
Una vez en marcha las obras del AVE a Palencia, que cuentan con financiación europea para ejecutar los tramos hasta Alar y la duplicación de vía entre Santander y Torrelavega, con cargo al Mecanismo de Recuperación y Resilencia, la reivindicación defendida por el presidente en Bruselas se ha centrado en la comunicación con Bilbao, para cuya defensa ha pedido “una postura muy firme” al Gobierno de España, dado que la Comisión Europea no es partidaria de modificar su planificación.
Aunque el Ministerio ha comprometido ya su apoyo, ha anunciado que instará tanto al presidente, Pedro Sánchez, como a la propia ministra de Transportes, Raquel Sánchez, a defender ante las autoridades europeas la inclusión de esta infraestructura en el Corredor Atlántico, como está haciendo el presidente francés, Emmanuel Macron, con el puerto de Brest, aprovechando la reforma del reglamento actualmente en tramitación y que será aprobada por la Comisión Europea en el plazo aproximado de un mes.
“Ahora el Gobierno de España tiene que hacer su tarea”, ha recalcado Revilla, para quien esta obra es “fundamental para articular Europa” y además va “en la línea” de la apuesta comunitaria por el ferrocarril para reducir el tráfico por carretera, de acuerdo con los principios del Pacto Verde europeo.
El jefe del Ejecutivo ha incidido en el apoyo explícito que ha logrado en Bruselas de los vicepresidentes de la Comisión Josep Borrell y Margaritis Schinas para mediar en favor de Cantabria ante la comisaria de Transportes, Alina Valean, pese a las reticencias mostradas por el responsable de la Política de Redes Transeuropeas de Transportes e Inversiones, Pablo Fábregas.
“Esa batalla no está perdida”, ha asegurado, a la espera de que la Comisión se pronuncie, previsiblemente durante el mes de diciembre. Además y en el caso de que el órgano de Gobierno de la UE no atienda la demanda de Cantabria, el presidente tiene “mucha fe” en que la iniciativa pueda prosperar en el Parlamento europeo, a través de las enmiendas de los grupos mayoritarios.
De hecho, ha destacado el apoyo expresado por los eurodiputados españoles Izaskun Bilbao (PNV, RENEW EUROPE), Luis Garicano (Cs, RENEW EUROPE), Isabel García Muñoz (Alianza Progresista de Socialistas y Demócratas) y Pablo Arias (PPE), con quienes se reunió el pasado lunes durante su estancia en la capital belga.
Optimismo
El jefe del Ejecutivo se ha mostrado “optimista” respecto a la conexión ferroviaria de Cantabria con Europa por dos razones. En primer lugar, porque el tren con Palencia es una realidad ya, con dos tramos en obras hasta Osorno y la duplicación de vía entre Santander y Torrelavega adjudicada, a lo que se añade la licitación, a partir del primer trimestre de 2022, del trazado hasta Alar del Rey, mientras avanzan los estudios técnicos del tramo hasta Reinosa. Este tren conectará la capital cántabra con Madrid en menos de 3 horas cuando esté finalizado (3:15 horas en el momento en que llegue a Alar) y supondrá la unión con Europa “en el mismo plazo o antes que Galicia y Asturias”.
En segundo lugar, ha valorado la apertura de un “periodo de lucha” para conseguir el tren con Bilbao y ha anunciado que a finales de año se darán a conocer las diferentes alternativas que contempla el estudio informativo encargado por el Ministerio de Fomento, entre las que Cantabria apostará por aquella que contemple un tren mixto de pasajeros y mercancías, con paradas en Laredo y Castro, y que comunique ambas capitales en 45-50 minutos. “Hemos empezado a hablar del tren Santander-Bilbao. Estamos sentando las bases para que Cantabria pierda ya el aislamiento de por vida”, ha enfatizado.