El Ayuntamiento de Santander ha recibido una mención en la categoría de rehabilitación al proyecto del centro cívico de Tabacalera dentro del XIX Premios de Arquitectura Antonio Ortega Fernández y Julio González Alloza del Colegio Oficial de Arquitectos de Cantabria.
El concejal de Fomento, Cesar Díaz, ha sido el encargado de recoger la mención y ha agradecido al Colegio la distinción obtenida para un proyecto municipal que ha contado con una inversión de 4,8 millones de euros.
Elaborado por los arquitectos Luis Fernández del Arco y Eva de la Fuente Rentería, de FDA Arquitectos, Díaz ha recalcado que el proyecto ha respetado la fisonomía del edificio y ha conseguido incorporar una zona verde vertical a un patio interior, antes inexistente, introduciendo luz natural en todas las plantas. De esta manera, se consigue el contraste entre la naturaleza que supone el jardín vertical y la memoria de su uso como almacén de tabaco en el pasado.
El edificio, que fue inaugurado el pasado mes de marzo, ha supuesto recuperar parte del patrimonio de la ciudad y el Ayuntamiento ha aprovechado para convertir sus 2.800 metros cuadrados en un espacio moderno, accesible y eficiente energéticamente, dotado con múltiples salas para atender las diferentes necesidades de los ciudadanos e incluye el jardín vertical más grande de Europa, con sus 600 metros cuadrados de superficie.
Un jardín vertical que ha atraído la atención de numerosos medios de comunicación internacionales y que ya se ha difundido en las televisiones de Rumanía, Rusia, Ucrania, Estados Unidos, China y Dubái, así como el canal Euronews, la revista National Geographic y el periódico ABC.
El edil ha remarcado, además, que el proyecto de rehabilitación del edificio ha puesto en valor la cubierta como un espacio de actividad, generando un mirador sobre la bahía, al tiempo que se recupera el uso existente en el proyecto original, como terraza-jardín.
Finalmente, ha recordado que el Ayuntamiento ha conseguido llevar a cabo estas obras, ejecutadas por la UTE Teginser-Senor, gracias a un acuerdo de cesión con Patrimonio del Estado para revalorizar este edificio de carácter racionalista, cerrado desde el año 1993, que se corresponde con los primeros pasos en España del denominado estilo internacional, y ponerlo a disposición de los vecinos.