La Junta de Personal de Valdecilla y de los centros de salud de Santander (area I) ha denunciado «recortes» presupuestarios, ha reclamado que se contrate más personal y se mejoren las condiciones de los profesionales y ha advertido que, si no ve un cambio «radical» en la situación, habrá movilizaciones.
La Junta de Personal de esta área sanitaria, integrada por todos los sindicatos, ha criticado la «nefasta» gestión que, a su juicio, se está llevando a cabo tanto por parte de los responsables sanitarios como políticos, encabezados –dicen– por el consejero de Sanidad, Miguel Rodríguez, y el presidente, Miguel Ángel Revilla, a los que ha acusado de estar «más preocupados en usar la sanidad como instrumento de publicidad, propaganda y autobombo que como herramienta útil para los ciudadanos».
Ha asegurado tener conocimiento que, desde el pasado mayo, «se han exigido» por parte del Servicio Cántabro de Salud «recortes valorados en 10 millones de euros» en Atención Primaria así como «partidas proporcionales» en los hospitales del presupuesto asignado para el
2021, «todos ellos fundamentalmente en gastos de personal», una situación que cree que «se agravará» para 2022.
Además de ello, ha denunciado un «oscurantismo total» en la información requerida por los sindicatos para poder hacer su trabajo ara poder realizar nuestro trabajo y una «falta absoluta de diálogo», especialmente –dice– «con un SCS y una Consejería de Sanidad completamente inoperantes en todo lo referente a los recursos humanos y en el incumplimiento de los acuerdos alcanzados y refrendados en los últmos años». Según ha indicado, la situación extraordinaria del Covid «ha tensionado hasta el extremo» unas estructuras sanitarias que, según ha afirmado, «ya venían arrastrando años de crisis y de precariedad».
«No vamos a tolerar más recortes sino que exigimos que los presupuestos del 2022 recojan una subida sustancial del capítulo destinado a invertir en el principal activo con que cuenta el SCS, el humano, que nos permita acortar las abultadas listas de espera, disponer de más tiempo y personal para atender adecuadamente a los pacientes y frenar la sangría de capital humano experimentado y formado que cada año nos abandona en busca de mejores condiciones laborales«, ha señalado la Junta.
Ha llamado también la atención que, debido al COVID, Cantabria ha recibido un aumento de recursos para hacer frente a los gastos extraordinarios originados y considera además que una parte de los fondos europeos de recuperación necesariamente deberán ir destinados a la reconstrucción de una Sanidad «que también ha quedado arrasada por el virus en su actvo más preciado: los profesionales».
En esta situación, la Junta ha exigido finalizar con los «recortes» y «ajustar la fnanciación a la realidad y necesidades«; «retomar» el diálogo con los representantes de los trabajadores para mejorar la gestón; aumentar los recursos humanos para mejorar la calidad asistencial y cumplir los acuerdos de mejora para los profesionales, frmados entre la administración y los sindicatos.
«Si no vemos un cambio radical y sustancial tanto en los próximos presupuestos de Cantabria como en las actitudes de los dirigentes sanitarios de esta región, procederemos sin más dilación a iniciar movilizaciones por parte del personal de toda la sanidad cántabra», ha advertido.
Poco después, el consejero de Sanidad ha sido cuestionado en el Instituto de Investigación Sanitaria Valdecilla (IDIVAL) estas afirmaciones de la Junta de Personal y ha asegurado que «no sabe exactamente» a lo que ésta se refiere cuando habla de recortes.
«Yo lo que sé son datos y los datos son que el Servicio Cántabro de Salud en este año, en 2021, va a tener un gasto en capítulo I (en personal) de un 5% más que el año pasado, un 11% más que en 2019 y un 21% más que en 2018″, ha dicho.
Rodríguez ha señalado que, si eso se traslada a personas, da como resultado que este año se ha tenido a 650 personas contratadas más que el año pasado, 700 más que en 2019 y 1.000 más que en 2018. «Por lo tanto no sé a que se refiere», ha afirmado el consejero, que ha precisado que la relación con los órganos de representación de los trabajadores le corresponde a las gerencias de las áreas.