El Gobierno de Cantabria ha acompañado en los últimos años el crecimiento de la fábrica lechera que la multinacional francesa Andros posee La Serna de Iguña con una aportación superior a los 4 millones de euros desde el año 2016, periodo en el que la empresa ha invertido alrededor de 24 millones de euros en la mejora de sus procesos e instalaciones.
El presidente cántabro, Miguel Ángel Revilla, y el consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Guillermo Blanco, han visitado hoy la planta ubicada en el municipio de Arenas de Iguña y han reiterado el apoyo del Ejecutivo a sus planes de expansión, que pasan por la inversión en los próximos años de cerca de 10 millones de euros para ampliar su capacidad de producción. Para ello, Andros ha concurrido a la convocatoria de ayudas a la transformación y comercialización de productos agrícolas vigente, que aún está abierta, y aspira a una subvención máxima de 1,7 millones de euros. De concretarse la operación en estos términos, el apoyo autonómico en los últimos 5 años rondaría los 6 millones de euros y las inversiones del grupo francés en Cantabria superarían los 33 millones de euros.
Miguel Ángel Revilla y Guillermo Blanco han destacado que la colaboración del Gobierno regional en este tiempo ha servido para aumentar la producción de la fábrica, que en 2021 prevé superar las 85.000 toneladas, así como para modernizar sus instalaciones con la mejor tecnología existente en el sector y generar empleo en el Valle de Iguña. Concretamente, el número actual de trabajadores asciende a 260, más del triple de los que había en 2009. El consejero ha incidido, además, en la “corresponsabilidad” que existe entre el sector primario y esta empresa “emblemática y señera” que contribuye a poner en valor un producto fundamental para Cantabria como es la leche. En este sentido, Blanco ha puesto nuevamente a disposición de los directivos las diferentes líneas de ayuda habilitadas por su departamento para apoyar la modernización de las industrias agroalimentarias y ha solicitado a Andros trabajar «de la mano” de un sector con el que mantiene una dependencia mutua.
El presidente y el consejero han estado acompañados en la visita por el director general de Andros España, Jorge Eugui; el director de Recursos Humanos, José Luis Díaz; el director de la fábrica de La Serna, Javier Hernández; la directora general de Pesca y Alimentación, Marta López, y el alcalde de Arenas de Iguña, Pablo Gómez, entre otros.
Por su parte, Jorge Eugui ha significado la “excelente relación de colaboración” con el Gobierno regional, que se ha traducido en un crecimiento importante de la empresa tanto en producción como en empleo en los últimos años. El máximo responsable de Andros España confía en que esa colaboración se mantenga en el futuro para llevar a cabo los proyectos en los que trabaja la firma, entre ellos la construcción de una subestación eléctrica que garantice el suministro a la planta y el nuevo edificio de oficinas, que aportará ventajas en materia de “seguridad y cohesión social”.
Finalmente, el alcalde ha valorado la importancia de esta fábrica para el municipio y para el Valle de Iguña en general en términos de riqueza y empleo, al tiempo que ha garantizado el apoyo de la administración local para materializar las actuaciones previstas en el futuro.
La empresa
La multinacional francesa Andros se dedica a la producción de frutas y lácteos desde 1992 y tiene empresas repartidas por todo el mundo, la mayoría en Europa. El 49% de su producción total son frutas y el 47% lácteos, mientras que el porcentaje restante se corresponde con la elaboración de golosinas y congelados. El de La Serna de Iguña es uno de los 3 centros lácteos que tiene en España (13 en todo el mundo), junto con el de Granada y Murcia. La planta cántabra fabrica yogures firmes, batidos y líquidos, además de postres lácteos como arroz con leche, natillas y cuajada. Además, elaboración productos de marca blanca para varias cadenas de supermercados.
Su producción ha experimentado un incremento constante en los últimos años y en 2021 tiene previsto superar las 85.000 toneladas. De forma paralela a ese aumento de la producción, su plantilla se ha triplicado desde los 68 trabajadores que tenía en 2009 hasta los 260 actuales. En ese proceso de expansión, la compañía ha contado con el apoyo del Gobierno de Cantabria a través de diferentes ayudas a la transformación y comercialización de productos agrícolas en sus diferentes convocatorias.