La plataforma Stop-Desahucios ha denunciado el desalojo previsto para el próximo día 19 de una familia -un matrimonio con dos hijos de 2 y 4 años, uno de ellos con discapacidad, que reside en el barrio santanderino de La Albericia.
Según ha explicado la plataforma en nota de prensa, la pareja ha estado pagando hasta hace unos meses el alquiler de la vivienda donde residen, pero han dejado de hacerlo debido a que ambos se encuentran en paro y viven gracias a una renta social básica.
La familia firmó el alquiler de la vivienda en 2014 y pagaba 275 euros al mes por una casa en un «estado deplorable», según la plataforma, que la tilda de «infravivienda», ya que no reúne «las condiciones mínimas para la habitabilidad».
A finales de 2018 fueron demandados y sentenciados al desalojo de la vivienda por el impago de «unos exiguos» 1.650 euros. Según la plataforma, la vivienda es propiedad de una inmobiliaria «y parece que detrás del desahucio se encuentra una operación para construir nuevas viviendas en la zona donde se ubica la casa».
En este caso, los miembros de la plataforma no harán ningún llamamiento a paralizar el desahucio ya que «las condiciones de la vivienda son infrahumanas», y esperan conseguir «una alternativa habitacional en los próximos días».
Para ello, el colectivo está en contacto con la Oficina de Emergencia Habitacional (Gobierno de Cantabria) y con el Ayuntamiento de Santander para poder proporcionar un alojamiento inmediato a esta familia.
Para ello, mañana miércoles una representación de la plataforma se entrevistará con la alcaldesa, Gema Igual, y también están a la espera de que el Gobierno de Cantabria «ofrezca una alternativa» en Santander.
La plataforma denuncia la «falta de viviendas de alquiler social en Santander, donde, según sus datos, se producen unos 700 desahucios al año.
En este sentido, augura que «en los próximos dos-tres meses se van a producir una decena de desahucios y las instituciones ‘deben ponerse las pilas'».