El Gobierno de Cantabria ha reiterado su apoyo a los compromisos del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico con la Unión Europea y al impulso de una agenda global ambiciosa en materia de biodiversidad y lucha contra el cambio climático.
Así lo ha señalado el consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Guillermo Blanco, al finalizar la reunión del Consejo Consultivo de Política Medioambiental, presidida por la ministra Teresa Ribera, que se ha celebrado esta tarde por vía telemática, como previa al Consejo de Ministros de Medio Ambiente de la Unión Europea que tendrá lugar este viernes.
Blanco ha compartido la postura del resto de Comunidades Autónomas sobre la propuesta de Reglamento del Parlamento Europeo y del Consejo por el que se establece el marco para lograr la neutralidad climática y se modifica el Reglamento denominado ‘Ley del Clima Europea’.
Así, ha defendido el «firme compromiso del Ejecutivo regional para alcanzar la «neutralidad climática en el año 2050» y su apoyo para conseguir que el objetivo de reducción de emisiones para 2030 sea del 55% comparado con 1990. No obstante, el titular de Medio Ambiente ha remarcado que «dada la importancia de la normativa de comercio de derechos de emisión, estos compromisos de reducción deberían referirse también al año base 2005, año en que se inicia la citada normativa y año base para la normativa de reparto de esfuerzos por países para las emisiones difusas».
En lo que respecta a la participación, ha compartido la necesidad de llevar a cabo una «concienciación e implicación activa y coordinada» de todos los sectores económicos y sociales, así como de los distintos niveles de la administración, en la consecución de los objetivos marcados. Sin embargo, como han demandado también otras Comunidades, ha requerido un mayor reconocimiento del rol desempeñado por las autoridades regionales y locales «como agentes esenciales en la definición de políticas e implementación de medidas que han de contribuir a alcanzar estas metas».
El titular de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente también ha indicado que «es necesario que todos los gobiernos autonómicos participen en la elaboración de los planes nacionales de energía y clima y las políticas nacionales a largo plazo mediante un diálogo multinivel verdaderamente participativo, basado en las experiencias regionales y locales, para garantizar un enfoque más sistemático de la integración de los entes locales y regionales en estos procesos de transición hacia la neutralidad climática».
Por ello, ha incidido en la importancia de una financiación «suficiente y justa» a través de los instrumentos y mecanismos del Plan de Recuperación Europea y el próximo Marco Financiero Plurianual, «en los que se han de incluir objetivos específicos y directos para afrontar las medidas de mitigación y adaptación al cambio climático y para contrarrestar los efectos negativos en las personas y la economía de los países y regiones más vulnerables».
Conclusiones de la Comisión Europea en materia de biodiversidad
El consejero también se ha posicionado a favor del documento de conclusiones presentado por la Comisión Europea en materia de biodiversidad y de la Estrategia de la UE sobre la biodiversidad para 2030.
«Compartimos la profunda preocupación por los niveles actuales de degradación y pérdida de biodiversidad», ha declarado Blanco, quien ha subrayado la necesidad de «abordar urgentemente el desarrollo de la Estrategia sobre la Infraestructura verde de la Unión y sus tres pilares: valor del territorio en cuanto a biodiversidad, servicios ecosistémicos y conectividad».
Sin embargo, ha considerado «menos positivo» que en el documento no se haya destacado «el papel de las regiones, su contribución y su responsabilidad con los objetivos medioambientales» y, en este sentido, ha reclamado junto con el resto de Comunidades Autónomas una mayor participación y un mayor reconocimiento de las autoridades locales y regionales en el nuevo marco de gobernanza reforzada. «Nos parece fundamental adaptar mejor la estrategia a las necesidades y a las competencias regionales y locales, acompañando una financiación adecuada que garantice el cumplimiento de las medidas a adoptar», ha señalado el consejero.
Además, ha indicado que «para una implementación exitosa de la Estrategia es relevante» que estas conclusiones señalen como prioridad «la acción efectiva y coordinación entre todas las iniciativas y áreas políticas, a todos los niveles e involucrando a la sociedad civil, las autoridades y el sector privado». También que se reconozca la necesidad de dotarlas con los medios financieros correspondientes, aprovechando las sinergias, y con un marco de seguimiento robusto «pero sin que ello conlleve cargas administrativas innecesarias que le pongan freno».
De esta manera, ha solicitado que se reconozca que las acciones a favor de la biodiversidad requerirán «inversión pública y privada» y que una «proporción importante» del presupuesto de la UE y del gasto del nuevo instrumento Next Generation EU «ha de invertirse en la biodiversidad y en soluciones basadas en la naturaleza respetuosas con la biodiversidad».
Asimismo, ha reivindicado la previsión, dentro de este último instrumento, de un paquete específico y exclusivo referido a la biodiversidad. «Para todo ello, esperamos que pronto concluyan, de forma favorable, las negociaciones sobre el futuro Marco Financiero Plurianual y Paquete de Recuperación», ha manifestado el consejero.