El consejero de Innovación, Industria, Transporte y Comercio y vicepresidente de la Autoridad Portuaria de Santander, Francisco Martín, acompañado por el presidente del Puerto, Jaime González, ha visitado las obras que se están ejecutando para renovar la Estación Marítima, uno de los edificios singulares de la ciudad y principal puerta de entrada y salida de viajeros y que, tal y como ha expresado, lograrán que cuando un pasajero entre en el edificio encuentre una estación «diferente, luminosa, transparente, hacia la Bahía de Santander y con características de modernidad que un edificio de 50 años había perdido».
Por ello, Martín ha mostrado su agradecimiento a la Autoridad Portuario los trabajos que se están realizando ya que «se acercan nuevos tiempos para esta estación y para el tráfico de pasajeros en el puerto de Santander». En este sentido ha señalado que a finales de este año llega un barco que tiene otras características, con mayor capacidad, mayor eslora y mayor tamaño para el cual sea también modificado la infraestructura.
El consejero ha detallado que el Puerto va a «apostar muy fuerte para que Cantabria siga siendo esa referencia de pasajeros, que lo es a nivel nacional, pues somos el puerto con mayor tráfico de pasajeros en líneas convencionales», y ya que los barcos cada vez son de más tamaño, «nosotros como Puerto vamos a estar a la altura de las circunstancias».
Por su parte, Jaime González ha agradecido la presencia del Gobierno de Cantabria durante la visita de obras y ha declarado que se trata de «un día muy especial», no sólo porque el Puerto acaba de recibir el reconocimiento, por quinto año consecutivo, por parte de la Asociación ANFAC, como «el mejor en calidad de servicio logístico marítimo portuario», percibida por los fabricantes de automóviles en España, sino también por estar a punto de concluir con una aspiración que nació en el comienzo de la legislatura anterior como era «poner en valor este edificio» por la utilidad que tiene para pasajeros y para la propia Brittany Ferries, así como para el disfrute en la ciudad cuando esté concluido a finales de noviembre.
Concretamente, el presidente la Autoridad Portuaria de Santander se ha mostrado confiado a que sea el 1 de diciembre cuando se lleve a cabo la inauguración oficial, con la llegada del nuevo barco de Brittany y, posteriormente, quedarán entre dos o tres años para dar «el gran paso de transformación» del Puerto de Santander.
Las obras
La actuación en el inmueble, obra del arquitecto Ricardo Lorenzo, viene a completar la transformación del entorno marítimo, llevado a cabo el año pasado, y que supuso la integración del edificio en la ciudad y la apertura al uso público de los terrenos cedidos por el Puerto, pendiente únicamente de intervenir en el interior de la terminal marítima, ya que el exterior de la infraestructura se trata de un bien protegido.
La obra afecta principalmente a la construcción de la cubierta y estructuras de cerramiento para mejorar el estado de conservación, funcionalidad y aprovechamiento económico del edificio y para ello, entre otras intervenciones, se está procediendo a la impermeabilización de las cubiertas, la redistribución de los espacios interiores abriendo el nuevo vestíbulo hacia el sur, de cara a disfrutar de las vistas a la bahía desde el interior, la preparación de la cubierta transitable para futura terraza del restaurante, así como la instalación de nuevos espacios para la Policía Nacional, el Museo Machichaco o la oficina de turismo de CANTUR.
Proyectos a futuro
La Estación Marítima que hoy está en obras pasará en un futuro a ser estación de cruceros, mientras que la de Ferry se trasladará porque, según ha puntualizado el consejero, «llegarán barcos mucho más grandes que requieren otro tipo de rampas, otras anchuras, otras mangas», además de servicios de abastecimiento de gas licuado, porque «el futuro del transporte marítimo, sobre todo en aquellos barcos que hacen muchas escalas en los centros de las ciudades pasa por el gas licuado».
Además, la Autoridad Portuaria va a ejecutar la construcción de los tramos del 1-4 del muelle de Maliaño tras una inversión que rondará los 19 millones de euros, proyecto que se encuentra actualmente en fase de licitación.
El tramo 1-4 de los muelles de Maliaño dispone actualmente de almacenes cubiertos y una rampa ro-ro hidráulica en un buen estado de conservación, a pesar de haber sido construida a finales de los años 90. Por contra, el muelle de pilotes, ejecutado entre 1928 y 1932 con ocho metros de calado, presenta un avanzado deterioro estructural por encima de la bajamar, lo que impide su explotación comercial.
Las obras consistirán en la demolición del muelle actual y la construcción de uno nuevo para recuperar una longitud de atraque de 375 metros y 8 metros de calado, con la posibilidad de incrementarlo hasta los 9,5 metros mediante dragado, en caso de que fuera necesario en el futuro.
Esta infraestructura permitirá el atraque de buques ro-ro cargo y buques ro-pax (ferries), así como ocasionalmente cruceros, además del traslado de las líneas regulares de ferries al nuevo muelle del tramo 1-4 de Maliaño, liberando el muelle de bloques y la estación marítima para el atraque de cruceros, y podrá utilizarse también para el atraque de pequeños buques inactivos en su extremo sur.
Este proyecto incluye nuevo pavimento en la zona de maniobra y un saliente en su extremo norte para instalar una rampa roro flotante, similar a las utilizadas en todos los atraques ro-ro del puerto, los cuales son muy versátiles al no tener limitación de cargas de transportes especiales y poder apoyar cualquier rampa del buque sin limitación de manga.