Textil Santanderina ha planteado otro Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) por causas económicas y productivas, que afectará esta vez a 131 de los 317 trabajadores, más del 40 % de la plantilla.
La propuesta, trasladada esta semana por la dirección al comité de empresa, se aplicaría desde 1 de julio hasta el 31 de diciembre, y daría así continuidad al actual ERTE, que entro en vigor el 14 de abril y concluye el próximo 30 de junio.
Fuentes sindicales han indicado a esta agencia que con la nueva regulación planteada, que se empezará a negociar la semana que viene, 68 empleados irán al paro y a otros 63 se les reducirá la jornada. El anterior expediente, que concluye este mes, afectó a 273, el 86% de la plantilla.
Desde el comité ven con «preocupación» el nuevo ERTE, planteado antes de que finalice el actual. «Muy bien no nos parece», ha expresado a Europa Press.
Y es que aunque admiten que «si no hay trabajo, tiene que haber ERTE» y que dadas las circunstancias por la pandemia del coronavirus la regulación del empleo es «lo ideal», «no nos gusta lo que nos barruntamos en un futuro».
Así, los trabajadores de Textil Santanderina se muestran preocupados ya no a corto plazo, sino a medio y largo.
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