Izquierda Unida (IU) Cantabria presentará alegaciones al proyecto anunciado por el Ayuntamiento de Bareyo, el Gobierno de Cantabria y la Autoridad Portuaria de Santander para modificar el faro de Ajo a través de la intervención artística de Okuda, si bien la coordinadora autonómica, Leticia Martínez, ha precisado que «de momento, sólo tenemos un anuncio de una obra que va a empezar en pocas semanas y que ya ha conseguido un rechazo mayoritario en Cantabria».
De hecho, la líder de IU asegura que «ni siquiera existe expediente de obra todavía» y que el tema será abordado en el próximo Pleno municipal del miércoles, donde el alcalde, José de la Hoz (PRC) pretende aprobar una modificación presupuestaria de 20.000 euros «para pagar su parte del destrozo».
«Con esos 20.000 euros podría pintar el faro varias veces de blanco, conservando su esencia; es más, podría sacar a concurso esa obra para los trabajadores del municipio y alrededores que, seguro, que lo harían gustosamente y, además, supondría una fuente de ingresos en un período tan difícil como el que vivimos», ha defendido Martínez.
«Si con todo, insiste en que el espacio tenga la impronta de un determinado artista, puede volver al borrador de proyecto (que incluía la instalación de estatuas que respetasen el entorno natural que las albergaría) con el que se presentaba a las elecciones y por el que, quizá, parte de los vecinos de Bareyo le hayan dado su confianza; lo que es seguro es que nadie le votó sabiendo que buscaba invisibilizar la historia del municipio y de toda Cantabria de esa forma», ha criticado.
Según IU, «aparte de las dudas estéticas que despierta la obra«, existen «evidencias» en el Plan General de Ordenación Urbana de Bareyo que protegen el patrimonio «que el alcalde quiere borrar».
Motivadas por la protección «integral» del faro recogida en el PGOU, IU cuenta ya con un borrador de alegaciones «a la espera de conocer el expediente del proyecto» y no descarta la vía legal si fuese necesario.
«No puede ser que nos estén hablando constantemente con el respeto a la historia, las costumbres y las leyes y que luego les falte tiempo para saltarse todo», ha subrayado Martínez.