La atención sociosanitaria nace al amparo de la ley de dependencia. Se decide terminar con el concepto de asilo sin más, y se aplica una decisión política que establece como pilar básico que las personas en situación de dependencia puedan cubrir sus necesidades de desempeño de las actividades de la vida diaria.
Y para que las personas dependientes puedan vivir dignamente, son los profesionales de la atención sociosanitaria quienes se encargan de todo aquello que posibilite su autonomía personal y calidad de vida. El diagnóstico y la prescripción de los tratamientos de las enfermedades que tengan las personas dependientes es responsabilidad de la asistencia sanitaria.
La atención sanitaria le corresponde a la administración; la atención de las personas enfermas ha de disponer del uso de numerosa tecnología sanitaria, y esto le corresponde al sistema público sanitario.
Con esta premisa clara, y por consenso, se establece un modelo concertado, al igual que la educación, siguiendo sus pasos, para atender a la ciudadanía.
Al desarrollarse este modelo, y entrar en concurrencia los centros y residencias, estas se dotan de recursos que les hagan más atractivas, como la implementación de recursos sanitarios que sirven de atractivo a los posibles clientes, pero tienen una capacidad de actuación muy limitada.
Esta situación genera disfunciones, lo estamos viendo con esta pandemia, pero sobre todo, genera la sensación de que los centros sociosanitarios disponen de unos recursos sanitarios de los que realmente carecen.
Las residencias no pueden ser pseudohospitales porque la responsabilidad de la atención sanitaria es exclusiva del sistema publico de salud.
Por ello debemos reflexionar de nuevo sobre el modelo y sobre todo de la manera en que se ha desarrollado.
Hay que garantizar que las personas que están en residencias o centros de día, reciban atención sanitaria igual a la de todos, homologada y publica.
Y hay que poner en marcha un sistema de coordinación entre sistema de salud publica y sistema de atención a la dependencia, que garantice una atención sanitaria eficiente, responsable del sistema sanitario.