Una medida que supondrá que las arcas municipales dejen de ingresar 320.000 euros. El Pleno de Santander ha aprobado este jueves eximir a los hosteleros de la ciudad –más de 400– de pagar el impuesto de terrazas correspondiente al año 2020.
La medida ha contado con el apoyo del equipo toda la Corporación a excepción de los dos ediles del grupo mixto. Así el edil de Vox, Guillermo Pérez-Cosío, ha votado ‘no’ por las «dudas» sobre su legalidad y por considerar que no garantiza el mantenimiento del empleo y el edil de Unidas por Santander, Miguel Saro, ha decidido abstenerse.
Saro ha explicado que con su abstención «deja hacer» ya que considera que es «razonable» y «de justicia» no gravar a los hosteleros por algo –las terrazas– que no están utilizando pero a la que no vota ‘sí’ por sus dudas sobre la legalidad y por no estar de acuerdo con el «método».
Así, el edil considera que, antes de comenzar a adoptarse este tipo de medidas, se deberían fijar por parte del Consistorio las prioridades y luego aplicar medidas como esta.
También ha recordado que la tasa de terrazas es por la utilización privativa o el aprovechamiento especial del dominio público local, un espacio de los santanderinos que ahora, con las medidas de distanciamiento social que habrá que adoptar, considera que habrá que regular de forma distinta.
Por otra parte, tanto desde el equipo de Gobierno (PP-Cs) como desde los grupos de la oposición que han votado sí, esto es el PSOE y el PRC, han insistido en que no se debe hacer pagar a los hosteleros por algo que no están pudiendo utilizar y que, tampoco, aunque abran, podrán hacerlo en las condiciones que tenían fijadas antes del coronavirus.
Además, han subrayado que se trata de una medida para «aliviar» a los hosteleros, uno de los sectores más afectados por la crisis del coronavirus, que puede ayudar al mantenimiento del empleo.
Sobre el coste de la medida, la alcaldesa ha subrayado que es algo que el Ayuntamiento «se puede permitir». También, en cuanto a las dudas jurídicas, ha subrayado que el expediente de esta iniciativa está «perfectamente elaborado» y cuenta con los informes favorables y ha señalado que las posibles alegaciones se resolverán «con la legalidad en la mano».
PLAN DE CHOQUE
Igual ha señalado que esta medida formará parte de un plan de choque del Ayuntamiento de Santander «mucho más ambicioso» –lo que permita el Gobierno central y autonómico, ha dicho Igual–, «realista» y «propio de una Administración sostenible».
Ha señalado que el equipo de Gobierno (PP-Cs) presentará a los grupos de la oposición una primera propuesta con las principales líneas y estará abierto a las propuestas de los grupos. «Juntos los haremos mucho mejor», ha dicho.
Precisamente, Igual ha hecho un llamamiento a la «unidad» tanto dentro de la Corporación como entre Administraciones, esto es a los ayuntamientos, Gobierno de Cantabria y Gobierno central, al que ha vuelto a reclamar que deje a los municipios emplear su superávit para gastos relacionados con cubrir las necesidades generadas por el COVID-19.
La alcaldesa ha señalado que, según las primeras previsiones, el Ayuntamiento dejará de percibir unos 16 millones de euros por el coronavirus por tasas que no se van a cobrar de forma definitiva, por aquellas aplazadas o aquella recaudación que se verá disminuida por la reducción de la actividad.
También la pandemia ha supuesto un incremento de gastos del Ayuntamiento –1,7 millones con las medidas ya adoptadas– para dedicarlos a ayudar a los ciudadanos y colectivos afectados por la crisis.
La alcaldesa ha expuesto ante la Corporación algunas ayudas y medidas ya adoptadas y ha reconocido que hacer frente a las consecuencias del coronavirus hará que haya que «reorganizar» y «repensar» el Presupuesto municipal de este año para adaptarlo a las necesidades derivadas de la pandemia.
Así, ha anunciado que se va a establecer un cronograma de comparecencias de los concejales del equipo de Gobierno para que éstos planteen las propuestas de modificación de los respectivos presupuestos de sus áreas y ver qué partidas pueden readaptarse para centrarse en paliar la crisis del coronavirus.
También, y en lo relativo a la vuelta al trabajo presencial del personal municipal, ha avanzado que además de adoptarse las necesarias medidas de protección se les pretende realizar el test del coronavirus antes de su incorporación.
En el Pleno los grupos han planteado algunas propuestas que, a su juicio, deben adoptarse.
Imagen: Pleno de Santander – Juan Manuel Serrano Arce – Europa Press