«Hay que dejarse de contemplaciones y demás historias de Plan Marshall y de Pactos de La Moncloa. Hay que hacer un Prespuesto Extraordinario, afirma Ramón Tamames (Madrid, 1933) en TVE.
Ramón Tamames, catedrático de Economía que negoció en 1977 los Pactos de Moncloa por el Partido Comunista, ha abogado por un acuerdo del arco parlamentario, pero no serían unos segundos pactos. «Tenemos que hacer un gran presupuesto extraordinario que incluya los flujos privados, si el Estado quiere hacer un gran pacto tendrá que incluir a los empresarios», ha afirmado en una entrevista en La tarde en 24H. El economista ha expuesto que lo que motivó el acuerdo original fue la elevada inflación, mientras el actual momento exige «financiación para movilizar los recursos económicos» del país. «Eso es lo que hay que hacer y dejarse de Planes Marshall o de Pactos de Moncloa», ha zanjado.
Tamames ha calificado de «poco aconsejables» las comparaciones que algunas instituciones internacionales han hecho con la situación económica después de la Segunda Guerra Mundial. «Fue una destrucción total y lo que tenemos ante nosotros es un parón de la actividad económica», ha declarado, augurando la necesidad de «emitir deuda con unas cifras impresionantes» para atender los problemas de las empresas, los parados y los afectados por los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE).
«La inflación en aquél momento estaba en un 26% y con una moderación salarial que se pusoien el 19% al año siguiente, en el 78, y esto permitió un clima nuevo con la posibilidad de avanzar en 1978 hacia la Constitución. Muchos entienden que los Pactos de La Moncloa fueron la base logística de la Constitución y todo eso en conjunto significa un compromiso histórico que cumplimos en España», afirmó.
Acerca de equiparar la situación de 1945 hasta 1977 con la actual de 2020, Tamames manifiesta que «creo que estas comparaciones son bastante poco aconsejables. La II Guerra Mundial fue una debastación total, una destrucción de Europa concretamente de la Unión Soviética de entonces y de gran parte del resto del mundo incluido Japón. Aquello fue una destrucción total y ahora lo que tenemos ante nosotros es un parón de la actividad económica de 2 a 3 meses con una caída del Producto Interior Bruto (PIB) que puede llegar al 15% y lo que hay que hacer es reactivar con el desescalamiento las actividades productivas planteando una normalización con un calendario».
Acerca del cómo Tamames añade que «hay que hacerlo con los recursos que tenemos nosotros más los que pueden venir de Europa, del Banco Central Europeo que facilita la liquidez de los bancos y la emisión de deuda pública por parte de los estados miembros y que hace posible una financiación junto con el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) que permite acuerdos concretos para financiar parados, etc. Eso es lo que tenemos que hacer, un gran Presupuesto Extraordinario«. Al mismo tiempo el profesor Tamames afirma que «si el Estado quiere hacer unos presupuestos tendrá que incluir a los empresarios que son los que crean empleo y que son lo que tienen la responsabilidad directa y diaria de los recursos y dejarse de contemplaciones y demás historias de Plan Marshall y de Pactos de La Moncloa porque lo que tenemos es una falta de financiación para movilizar nuevamente os recursos económicos de España«.
Por último, acerca de la buena química, relación personal que hubo en 1977 trasladándolo al día de hoy, Tamames concluye diciendo que «no es un problema de química, aquí el Gobierno no ha presentado ningún proyecto verdaderamente importante y ya están hablando de la renta mínima vital cuando tenemos procedimientos en la Seguridad Social que se pueden aplicar perfectamente. En cambio la renta mínima vital es un problema muy serio que se ha descartado en países como Finlandia o en Suiza donde se sometió a referéndum el pueblo lo rechazó, porque lo que hay que buscar son incentivos para volver al trabajo y no mecanismos para que la gente pueda vivir y eso es importante, pero al mismo tiempo buscando trabajo para conseguirlo. Eso es lo importante. No tenemos todavía una base cuantitativa de lo que tenemos como problema y de los que necesitamos como recursos. Un Presupuesto Extraodinario».