El Instituto Cántabro de Servicios Sociales (ICASS) no tiene «constancia» de que se haya producido «ningún maltrato o vejación a menores» en el Centro de Atención a la Primera Infancia (CAPI) de Santander.
«Ningún juez nos ha trasladado que se esté investigando o juzgando ninguna denuncia por maltrato o vejación a los niños» de estas instalaciones de la ciudad, ha asegurado en un comunicado la directora general del ICASS, Felisa Lois, que se ha mostrado «sorprendida e indignada» ante las acusaciones de IU Cantabria en las que afirma que existe una denuncia judicial contra trabajadores de este centro por maltrato y vejaciones a niños de 0 a 3 años, y ha pedido un
«En política no puede servir todo. Se está generando una alarma social que no se ha contrastado y eso es muy grave», ha afirmado Lois, que ha insistido en que ni ella, ni el ICASS tienen «conocimiento» de que haya «una denuncia tan grave como ésta, que pone en entredicho la atención que prestan los profesionales del CAPI hacia los menores».
Además, la directora del ICASS ha manifestado que «siempre que se ha detectado la más mínima incidencia relacionada con el servicio, se ha reaccionado rápidamente y se han puesto en marcha los mecanismos con los que cuenta la Administración para darles solución de manera inmediata y para que no interfieran en la calidad del servicio».
En este sentido, Lois ha manifestado que en el ICASS «se ha tenido conocimiento de una serie de incidencias laborales, entre trabajadores, relacionadas con el funcionamiento diario del centro».
«Ante esas situaciones laborales, el ICASS ya está actuando, y se ha solicitado una auditoría a la Inspección de Servicios Generales para que evalúe la distribución de funciones de los trabajadores del CAPI», ha explicado.
La directora general del ICASS ha aclarado que las incidencias detectadas «no están relacionadas con las manifestaciones realizadas hoy por Izquierda Unida» y ha mostrado la disposición del instituto, «como en todos los casos, a colaborar en todo momento con la justicia».