El Ministerio de Educación y Formación Profesional, el Ministerio de Universidades y las comunidades autónomas han decidido este martes aplazar los exámenes de Selectividad de este año, previstos durante las primeras semanas de junio, tras la suspensión de clases por el coronavirus.
Sin embargo, las administraciones educativas todavía no han acordado nuevas fechas para las pruebas de acceso a la universidad, que cada año realizan unos 300.000 estudiantes en toda España. El calendario definitivo dependerá, sobre todo, de cuánto se prolongue el estado de alarma decretado el pasado sábado por el Gobierno de Pedro Sánchez, apuntan fuentes del Ejecutivo.
Representantes de ambos ministerios y de las comunidades, reunidos este martes en la Comisión General de la Conferencia de Educación, han acordado crear un grupo de trabajo para buscar nuevas fechas tanto para la convocatoria ordinaria de la Selectividad de 2020, prevista inicialmente antes del 19 de junio, como para la extraordinaria, que se celebra en julio o septiembre dependiendo de cada región.
La reunión, presidida por el secretario de Estado de Educación, Alejandro Tiana, y el secretario general de Universidades, José Manuel Pingarrón, se ha celebrado este martes por videoconferencia, y en ella han participado además representantes de la Conferencia de Rectores de Universidades Españolas (CRUE).
El objetivo de este encuentro telemático, convocado por el Gobierno, ha sido «asegurar que ningún estudiante pierde el curso debido a las circunstancias actuales y también que el acceso a la universidad se producirá en condiciones de equidad y justicia para todos», ha señalado el secretario de Estado de Educación, en declaraciones remitidas por el Ministerio.
El aplazamiento de la antigua Selectividad, denominada ahora Evaluación de Acceso a la Universidad (EvAU), supondrá retrasar el periodo de matriculación universitaria del próximo curso 2020-2021, cuyo calendario se adaptará a las fechas definitivas de las pruebas que realizan los alumnos de Bachillerato.
SEPTIEMBRE, EL PEOR ESCENARIO
Dependiendo de la duración de la crisis provocada por el coronavirus se contemplan diferentes alternativas, desde retrasar la Selectividad a julio hasta postergarla a septiembre en el peor de los casos. Un escenario que el presidente de CRUE, José Carlos Gómez Villamandos, no descartaba la pasada semana.
«Ahora mismo hay que prevenir el peor escenario posible, que sería llevar la EvAU a septiembre, y ojalá ese escenario no se produzca, pero hay que estar preparado para cualquier contingencia para adelantarnos a todo lo que pueda pasar», señalaba el presidente de los rectores en una entrevista a Europa Press.
Organizaciones estudiantiles como CANAE y el Frente de Estudiantes han pedido durante los últimos días el aplazamiento de la Selectividad tras la suspensión de las clases durante al menos dos semanas decretada el pasado sábado por el Gobierno, una medida que algunas comunidades ya implantaron en sus centros educativos hace una semana. El Sindicato de Estudiantes reclama la suspensión definitiva de las pruebas este año, y propone que la nota de Bachillerato sirva de forma excepcional para acceder a la universidad.
En la reunión de la Comisión General de la Conferencia de Educación de este martes también se ha acordado «flexibilizar» las prácticas en el centro de trabajo de Formación Profesional, según el Ministerio de Educación. También adaptar el calendario de las pruebas de acceso a la Formación Profesional de grado medio o superior para quienes no cuenten con los requisitos académicos de acceso a estas enseñanzas. Estas medidas se concretarán en una reunión de la Comisión de Formación Profesional que se celebrará la próxima semana.