El consejero de Innovación, Industria, Turismo y Comercio, Francisco Martín, afirmó anoche que al gran momento que vive la gastronomía cántabra «aún le queda mucho futuro por delante» porque, en su opinión, además de la calidad de la cocina regional, una de sus grandes virtudes es «la edad media de nuestros cocineros».
Martín, que definió a los chefs cántabros como «orfebres», aseguró que la juventud de los mismos hace presagiar que aún «seguirán creciendo y creando grandes obras de arte en el futuro» y alabó que su entrega y ejemplo estén sirviendo «para conformar una gran cantera en los fogones de Cantabria»