Pedro Sánchez habrá hecho un negocio ruinoso si el 10 de noviembre se confirman los datos de la encuesta de GAD3 para este periódico. El PSOE solo podría aspirar a igualar los 123 escaños que obtuvo el 28 de abril, y el escenario para obtener la investidura, no digamos para gobernar, sería aún más inmanejable que hace siete meses. Habría hueco para operaciones más matemáticas que políticas para que el líder socialista se asegurase un nuevo mandato, pero la única que parece seria es la abstención del PP, y ni aún así sería una alternativa segura si se diera el improbable caso de que el resto del arco parlamentario votase en contra. El PSOE podría obtener una victoria con sabor a derrota.
El sondeo de GAD3 se efectuó entre el 14 y el 31 de octubre con una muestra de 7.900 entrevistas, y recoge el impacto en el cuerpo electoral de la sentencia del Supremo a los líderes del ‘procés’, los disturbios en Cataluña y la exhumación de Franco. La fotografía, por tanto, es reciente aunque hay que tener en cuenta que en la última semana hay movimiento y cambio de voto.
Los socialistas están estancados, lejos de los 140 pronosticados por algún gurú de Sánchez, y con tendencia a la baja. El desdeñado riesgo de la abstención parece real y una franja de su electorado castigará a Sánchez sin ir a votar. Los sucesos de la última quincena de octubre, lejos de ser un empujón, han sido una rémora para el PSOE.
El PP ha visto frenada su carrera ascendente hacia los cien escaños que vaticinaban hasta ahora las encuestas, y obtendría entre 92 y 95 diputados, un importante salto respecto a los 66 de abril y que ratificarían a Pablo Casado como líder indiscutible de la oposición. Las causas del parón hay que buscarlas en el crecimiento de Vox, cuyo discurso de mano dura sin contemplaciones con el independentismo y el rechazo frontal a la exhumación de Franco habrían aglutinado en torno a Santiago Abascal el voto de la derecha más radical. El giro hacia la moderación de Casado, por otra parte, habría servido para recuperar para el PP voto de Ciudadanos, pero también habría provocado fugas a Vox. Soplar y sorber a la vez se vuelve a demostrar que es imposible.
Los de Abascal duplicarían su presencia en el Congreso y se convertirían en la tercera fuerza nacional, y en alguna comunidad, como Murcia, disputarían ser la primera. Lejos de menguar la extrema derecha se asentaría con fuerza en el teatro de la política.
Manotazos de ahogado
Todo lo contrario que Ciudadanos, que de aspirar a todo pasaría a ser casi residual. La cerrazón de Albert Rivera para situarse en la derecha del tablero y sus bandazos apuntan a un descalabro histórico el 10-N. El líder liberal, que soñaba con la Moncloa, se conforma con ser la llave para otro. Hasta apela al España-Malta para remontar. Un discurso que suena a manotazos de ahogado.
Unidas Podemos también retrocedería, pero no con ese estrépito. Pablo Iglesias sufriría asimismo el castigo de la abstención de los suyos por no haber pactado con el PSOE tras el 28 de abril. Además la situación en Cataluña perjudica fuera de ella a los morados, partidarios de un referéndum pactado. Lo que no parece que vaya a ser un facto negativo es la irrupción de Íñigo Errejón y su Más País, que apunta a que el partido madrileño será irrelevante en el concierto nacional.
Con estos mimbres, la investidura se perfila como una tarea más endiablada que en junio. Ni la izquierda suma –se quedaría entre 148 y 157 escaños–, ni la derecha llega –se movería entre 158 y 161–. Eso sí, se deshace el empate a 43% de los votos de hace siete meses, y los conservadores cosecharían el 45% por el 41,4 de los progresistas.
En un escenario realista, Sánchez solo podría aspirar a un nuevo mandato con la abstención del PP. Aunque podría no ser siquiera así si el resto de fuerzas se unen para votar en contra, posibilidad que hoy parece política ficción pero que no convendría descartar. Claro que también cabe que el líder del PSOE vuelva a reunir la macedonia de la moción de censura, mas no parece que los indepedentistas estén por la labor.
Ficha técnica de la encuesta
- Universo: residentes con derecho de voto en España.
- Ámbito: nacional.
- Cuotas: por sexo y edad de la población residente en cada provincia según el censo electoral (INE).
- Procedimiento de recogida de la información: entrevista telefónica asistida por ordenador (CATI) a teléfono móvil y fijo al 50%.
- Tamaño de la muestra: 7.900 entrevistas a teléfonos móviles y fijos.
- Error muestral: 1,1% (7.900) para el total de la muestra para un grado de confianza del 95,5% (dos sigmas) y en la hipótesis más desfavorable de P=Q=0,5 en el supuesto de muestreo aleatorio simple.
- Fechas del trabajo de campo: desde el 14 al 31 de octubre de 2019.
- Fuente: Grupo Vocento.