PROTEGER EL MEDIO NATURAL: La costumbre de abrazar estos ejemplares o arrancar parte de su corteza está dañando de forma grave a estos ejemplares únicos
El Gobierno de Cantabria, a través de la Dirección General de Montes y Biodiversidad, apela a un disfrute responsable del Monumento Natural de las Secuoyas del Monte Cabezón, que permita «preservar y mantener este legado natural», un signo «identitario de la biodiversidad y riqueza natural» de Cantabria que forma parte de la Red de Espacios Protegidos de Cantabria.
Para ello se instalará cartelería con indicaciones sobre cómo se debe de disfrutar de este paraje natural sin ocasionar perjuicio alguno a los árboles y el Ejecutivo central ha decido, además, que agentes del Medio Natural patrullen por la zona para evitar comportamientos imprudentes y ofrezcan consejos a los visitantes sobre las normas de actuación a evitar.
Con la llegada de la época estival se incrementa de manera notable el número de visitantes a este espacio, al objeto de compatibilizar un uso público responsable con una adecuada conservación de este espacio protegido, la presencia de agentes del medio natural permitirá identificar comportamientos indebidos y concienciar a los visitantes sobre las normas de actuación que permitan conservar estos ejemplares, de los pocos existentes en las zonas de costa.
La costumbre de abrazar estos ejemplares o incluso arrancar parte de su corteza está dañando de forma grave a estos ejemplares únicos que ven comprometida su continuidad y al prescindir de parte de su corteza se ven más expuestos a posibles plagas y enfermedades. Asimismo, el suelo en el que se ubican está sufriendo cada vez una mayor compactación, generada por las pisadas y la creación de sendas, que puede a largo plazo ocasionar la aparición de microorganismos que afecten al bienestar de los ejemplares
La parcela de secuoyas se plantó en la segunda mitad de los años 40 del siglo XX, como parcela experimental por parte del Instituto Forestal de Investigaciones y Experiencias (IFIE), y su existencia responde a la búsqueda de especies madereras más adaptadas a la necesidad de producción industrial en ese momento histórico. Hoy en día persisten 2,5 hectáreas, 848 ejemplares de esta especie, con una altura media de 36 metros y un perímetro medio de 1,6 metros, así como 25 pies de Pinus radiata.
Imagen: Salva González ( https://turismocabezondelasal.com)