De este modo, la regidora ha renovado su fidelidad a España, durante la jura de bandera civil que ha estado presidida por el jefe del Cuarto Militar de la Casa de Su Majestad el Rey, teniente general Emilio Gracia Cirugeda.
La parada militar también ha incluido un desfile de la Guardia Real por las inmediaciones del parque con todos sus efectivos desplazados a Santander, más de 600 militares, vehículos, caballería y unidad canina, y ha puesto fin al ejercicio anual que la Guardia Real ha realizado por primera vez en Cantabria y que ha supuesto actividades en cerca de 30 municipios de la comunidad.
Igual ha expresado el agradecimiento del Ayuntamiento de Santander por este programa de actividades que, según ha señalado, “contribuyen a estrechar los vínculos entre la sociedad civil y la militar, ponen en valor la misión de la Guardia Real al servicio de la Corona y acercan su labor a los ciudadanos”.
Del mismo modo, ha trasladado “el cariño y el reconocimiento de los santanderinos” a la labor que desempeñan las Fuerzas Armadas y ha felicitado al equipo humano que forma la Guardia Real por “el máximo esfuerzo, la profesionalidad y la excelencia que caracterizan su trabajo al servicio de la Corona”.
Historia
El ejercicio anual realizado esta semana en Cantabria se enmarca en el deseo de la Guardia Real por divulgar su labor y su legado, conformado por siglos al servicio de la Casa de Su Majestad el Rey. Creada en el siglo XI, es la más antigua de Europa y su misión consiste en proporcionar guardia militar, rendir honores y dar escoltas solemnes al Rey y a la Familia Real, así como a los jefes de Estado extranjeros cuando se ordene. Para ello cuentan en la actualidad con 1.545 miembros, entre tropa y mandos, que provienen de los tres ejércitos y a los que se suman como activos 170 caballos y 50 perros.