Un bombero forestal de 58 años y vecino de Terán, ha fallecido esta tarde cuando trabajaba en la extinción de un incendio en el monte Llendemozo, en el municipio de Cabuérniga. El bombero forestal, perteneciente a la cuadrilla forestal con base en Ruente y con más de 30 años de experiencia, se desvaneció y cayó desplomado por lo que sus compañeros llamaron al Centro de Atención de Emergencias 112 Emergencias e iniciaron las maniobras de reanimación.
El Centro 112 movilizó por este suceso, sobre las 17:00 horas, al equipo del helicóptero medicalizado del Gobierno cántabro, 061, Guardia Civil y personal del Instituto Cántabro de Seguridad y Salud en el Trabajo (ICASST). A su llegada a la zona, el equipo médico del helicóptero regional prosiguió las labores de reanimación cardiopulmonar a la víctima, aunque finalmente no pudieron hacer nada por salvar su vida.
El Gobierno de Cantabria ha lamentado profundamente la muerte de este empleado público y ha trasladado su afecto y apoyo a la familia, amigos y compañeros. Igualmente, ha reconocido la labor del empleado público fallecido, “con una amplia experiencia y dedicación”, así como la del resto de bomberos forestales autonómicos que “se juegan la vida para preservar el medio natural y rural y garantizar nuestra seguridad”.